El subsecretario de Estado de Interior, Luis Aguilera, ha confirmado a los medios de comunicación que la prueba de alcoholemia que le ha sido practicada al conductor del autobús siniestrado en Ávila ha sido negativa. Aguilera ha confirmado además que todos los papeles estaban en regla, el tacógrafo también y ha afirmado que hay que "investigar exactamente" lo que ha pasado "porque no hay una causa evidente". El subsecretario de Estado de Interior ha revelado también a los medios que el vehículo, por el año de matriculación, no tenía obligación de llevar cinturones de seguridad.