Era el proyecto estrella de la aeronaútica europea: el desarrollo del avión de transporte militar más avanzado tecnológicamente del mundo. Pero en sus 33 años de vida el A400M ha acumulado dificultades, problemas de fabricación y sobrecostes de hasta 11.000 millones de euros. Tantos que su coste por unidad ha pasado de cien a cerca de 160 millones y que su responsable de producción fue destituido este enero. Su vuelo inaugural había llegado con dos años de retraso por problemas en sus motores y su software, era el año 2009 y el propio rey Juan Carlos apoyaba el proyecto con su presencia.