Parecía que la hipótesis principal sobre la muerte de Lucía, según la cual la niña habría fallecido tras ser golpeada en la cabeza por el tren, cerraba el caso. Pero las líneas de investigación siguen muy abiertas. Según el informe de la autopsia, en el cuerpo de la pequeña no hay señales de haber caminado durante tres kilómetros por esta vía, llena de matojos y desniveles: una zona de muy difícil acceso.