La portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, afirmaba esta mañana que “hay que estar seguros” de que el material que se aplica a los pacientes es seguro. A mediodía Fernando Simón, director del Centro de Alertas y Emergencias Sanitarias Simón reconocía que se ha comprado material sanitario defectuoso. De los más de 640.000 test rápidos que llegaron de China el lunes, 9.000 no son fiables. Hasta la embajada de China en España admitía, vía Twitter, que esa empresa no tiene licencia para vender sus productos. Sanidad ha encontrado ya, dice, nuevos proveedores para paliar una polémica que reaviva, todavía más, las críticas al Gobierno de algunas comunidades. Piensan que Sanchez cometió un error al centralizar, en un principio, la compra de suministros.