A un lado una mujer mayor, cuya pensión -asegura- es de apenas 426 euros, enfrente la imagen de un supuesto menor extranjero no acompañado, que cuesta once veces más: 4.700 euros. Santiago Abascal salía a reivindicarlo "lo hemos puesto en un cartel y se han puesto todos nerviosos". Una provocación que la Fiscalía ya investiga por un posible delito de odio, "que la Fiscalía nos retire el cartel y que luego que suba a esta tribuna, durante esta campaña electoral y que nos arrebate el micrófono", desafiaba Abascal. La presidenta y candidata del PP, Díaz Ayuso se desmarca y ha recordado que la Administración regional está obligada a darles, a esos menores, oportunidades y facilitar su integración. Desde el PSOE lo califican de fascismo. "Si en vez de 'MENA's' ponemos judíos lo entendemos más, porque así fue el fascismo", decía el ministro de Transportes, José Luis Ábalos. Y Unidas Podemos emplea el mismo calificativo: fascismo. Ahora, serán la Fiscalía y la Junta Electoral las que decidan qué se hace con el cartel.