El Gobierno había aparcado sus explicaciones sobre el cambio de postura con el Sáhara a la espera de la comparecencia del ministro de Exteriores, José Manuel Albares, en el Congreso. Media hora ha empleado en su primer turno de comparecencia, y en ella no ha despejado la principal duda, si Argelia, nuestro principal proveedor de Gas que reaccionó con enfado, estaba al tanto de la decisión.