Nueve años después de que descarrilara el tren Alvia en Angrois (Galicia), accidente en el que murieron 80 personas y otras 144 resultaron heridas, este miércoles da comienzo el macrojuicio en Santiago de Compostela. En él se sentarán 522 testigos y dos acusados (el maquinista y el exdirector de seguridad de ADIF) para esclarecer aquella fatídica tragedia que marcó al pueblo español. El proceso durará cerca de nueves meses y en él están acreditados una treintena de medios de comunicación.