La mascletá se ve siempre desde fuera. La distancia de seguridad mínima para los asistentes a la típica fiesta valenciana es de 30 metros. Sin embargo, una cámara ha llegado este lunes hasta el lugar donde se tienen lugar las explosiones, hasta el corazón de la mascletá. Gracias a eso, podemos verla como la ven los pirotécnicos.