Decenas de bomberos trabajan para atajar el fuego que asola la Comunidad Valenciana y que ya se ha cobrado una vida, la de un piloto de un helicóptero de extinción de incendios. Otro aparato más también se ha estrellado, pero sus dos tripulantes siguen con vida. El fuego, que se declaró el pasado jueves, ha devorado casi 48.600 hectáreas. El hombre que fue detenido el domingo como supuesto autor del incendio que se inició en Andilla ha quedado en libertad con cargos, acusado de un delito medioambiental con imprudencia grave. Los bomberos trabajan sin descanso por aire y tierra para controlar los incendios, pero tienen un factor en su contra, el cambio permanente en la dirección del viento. Hoy habrá varias reuniones políticas con las que se pretende abordar la puesta en marcha "de la forma más rápida y eficaz posible" de las ayudas a los afectados.