Eran las diez de la mañana cuando un hombre de 30 años se abalanzó sobre un policía cuchillo en mano en un bar de Fuengirola. Le colocó el arma en el cuello y le pidió que le entregase su pistola. Cuando otros presentes en el establecimiento se percataron del nerviosismo del agresor, se lanzaron sobre él hasta lograr reducirlo. El agresor ha sido acusado de intento de homicidio, pero el juez lo ha dejado en libertad con cargos.