Más de 5.000 mujeres afectadas por la rotura de las prótesis defectuosas PIP sientan desde hoy en el banquillo a Jean Claude Mas, de 73 años y a cinco de sus directivos. El empresario francés se enfrenta a 5 años de cárcel por delitos de fraude, lesiones y homicidio involuntario. Mas fabricó conscientemente, y por dinero, implantes mamarios con gel destinado a alimentación, en lugar de hacerlo con un producto homologado. Eso facilitó su rotura y ocasionó infecciones y tumores, según denuncias. En España, la Plataforma de afectadas calcula que 18.000 mujeres se implantaron prótesis PIP.