Fue en el aparcamiento de este prostibulo donde uno de los clientes del Rey 2000 recibio la paliza. De madrugada, cuatro personas le robaron la cartera, el móvil, las llaves de su coche y huyeron en su vehículo. Anoche tres de los agresores eran detenidos y uno de ellos es José Fernando el hijo de José Ortega Cano.