El segundo temporal de noviembre de la Comunitat Valenciana descargó ayer con fuerza. El granizo y la descarga eléctrica fueron los elementos más destacables de una tren de convección que concentró varias tormentas a lo largo del día y que provocó precipitaciones intensas en Valencia y Castellón, así como que se batieran el récord de rayos en un día con, al menos, 5.425 registrados y un pedrisco histórico desde hace dos décadas. Por su parte, en Alicante una manga marina tocó tierra causando daños mobiliarios.