La lava había devorado todos los accesos y la costa oeste de la isla estaba práctimanete incomunicada hasta ahora. Una nueva carretera une Puerto Naos con Las Manchas. Son 2.3 kilómetros de asfalto. Una obra hecha a contra el reloj y en tiempo récord. La han terminado en tan solo dos meses. Circulamos por la nueva vía de emergencia y el paisaje es desolador. Todo cubierto de cenizan y a lo lejos el volcán Cumbre Vieja ahora dormido. Este nuevo tramo era un camino sin asfaltar, pegado a la colada del San Juan. A partir de hoy los agricultores podrán volver a regar sus plataneras, su principal motor económico. También podrán acceder los vecinoS, porque aunque todavía es una zona de exclusión tienen trabajo por delante para limpiar toda la ceniza y preparar su regreso a casa. Porque ya queda menos para que, además de su carretera, Puerto Naos también recupere su vida.