Elisabet recorre a pie el trayecto que el pasado lunes tuvo que hacer a los mandos de una guagua. Una pasajera con niño en brazos alertó de que el conductor se había desmayado y la joven no se lo pensó y corrió a sujetar el volante. Tiene 19 años y se está sacando el carnet de conducir pero supo mantener la calma. En el asfalto están las señales de los volantazos que dio pero con las indicaciones a gritos del conductor de otro autobus logró denenerlo. Mientras ella ponía a salvo a los pasajeros y evitaba un choque que podía haber sido una tragedia, alguien se llevó su cartera aunque afortunadamente, al menos, ha recuperado su documentación.