El atracador llegó en moto y oculto con su casco entró en la farmacia armado con un cuchillo. Tras amenazar a los clientes, consigue la recaudación, pero no se conforma. Entra en la rebotica buscando más, la cámara de seguridad es testigo de todo. Coge el movil del farmacéutico y en ese momento éste no duda en tratar de reducirlo. La escena es muy violenta. El atracador lanza hasta 30 puñaladas y consigue que 18 de ellas impacten en el brazo y el costado del farmacéutico. Se observa como brota la sangre incesantemente. Tras el violento asalto el atracador huye y el farmacéutico pulsa la alarma. " Un milagro que siga vivo" comenta el propietario de un kiosko cercano. Ahora el hombre se recupera de las heridas y los cortes, mientras los investigadores tratan de de identificar y de dar caza al agresor.