La zona de la Cícer de la playa de Las Canteras ha vuelto a convertirse en un vertedero improvisado al que cae toda la basura arrastrada por la lluvia desde el Barranco de La Ballena. En la jornada tormentosa de este miércoles, la lluvia se ha centrado enla capital grancanaria. Sus efectos se han visto en mayor medida en los puntos débiles de la ciudad, como son Bravo Murillo, la Avenida Juan XXIII y la clásica desembocadura del Barranco de La Ballena.