El espectáculo Disney on ice-100 años de magia sube el telón en el pabellón del Gran Canaria Arena, donde reúne a más de 65 personajes emblemáticos de la factoría animada en un gran show de patinaje sobre hielo. Desde clásicos como Mickey Mouse, Aladdín, el Rey León, La Cenicienta o La Bella y la Bestia hasta los más actuales de Pixar, como Buscando a Nemo, Toy Story o Los Increíbles, se deslizan por una pista de hielo de 800 metros cuadrados erigida en la superficie del Gran Canaria Arena, para concentrar cien años de cuentos en un espectacular montaje dirigido a más pequeños, pero también a los adultos. "Disney on ice es un espectáculo familiar, más que infantil, porque está diseñado para que el público adulto también lo pase bien", señaló Nicolás Reina, representante de Disney, que adelantó que "vendrán familias desde las siete islas para ver el espectáculo".

Durante cinco días consecutivos de funciones, el espectáculo combina 18 historias de Disney a lo largo de dos horas de aventuras coreografiadas que transitan desde lo romántico hasta lo heroico, pasando por el humor y el drama. Por lo tanto, se trata de una oportunidad única para que los más pequeños puedan admirar a Aladdín y al Genio practicando un salto mortal hacia atrás; a Dory y Nemo surcando el hielo en directo; y a las princesas clásicas de Disney bailando en el aire. El éxito mundial de esta producción se debe a la calidad del elenco, los números coreográficos y el vestuario, arropados por una lograda puesta en escena con efectos especiales y cuyo eje central es un imponente castillo que preside la pista.

La primera función arrancó con lleno absoluto y una magnífica acogida en la tarde de su estreno en el pabellón del Gran Canaria Arena. Miles de familias asistieron ayer a la primera función de la semana, que embarcó a centenares de niños y niñas en un total de 18 aventuras de los personajes más queridos de la factoría animada, a través de coreografías y números acrobáticos sobre el hielo.

Mickey Mouse, Blancanieves, la Cenicienta, Timón y Pumba, Aladdín, Mulán, Buzz Lightyear, Pinocho, Nemo y muchos más se deslizaron sobre una pista helada de 800 metros cuadrados ante los gritos exaltados de los niños, que aplaudían y exclamaban los nombres de sus personajes favoritos a medida que aparecían en escena.

Con algunos problemas de acceso para los vehículos, las puertas de las instalaciones deportivas no había abierto aún cuando cientos de niños se agolpaban ya junto a los puestos de ventas de Disney on ice situados a la entrada del Gran Canaria Arena. Pero la espera no fue en vano. Los más fieles admiradores de Disney pudieron admirar en vivo y en directo la danza de Aladdín enlazado a una docena de genios azules; el hermoso baile de la bella y la bestia, ataviados en un logradísimo vestuario muy afín al de la película animada; a Los Increíbles bordando una simpática coreografía al unísono y a todo el reparto animal de El Rey León reviviendo este memorable relato sobre patines. Y todo este show se sucedió durante dos horas en torno a un espectacular castillo mágico como eje central de las representaciones, que presidía el escenario de hielo flanqueado por miles de butacas abarrotadas.