El presidente del Gobierno canario, Paulino Rivero, y el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, constituirán el próximo lunes en Madrid la Junta de Seguridad con el fin de coordinar las funciones de la Policía Canaria, que acaba de iniciar su despliegue, con las de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Los gabinetes de Rivero y Rubalcaba llevaban varios días cerrando las agendas para que la primera Junta de Seguridad tuviese el más alto nivel político, con el fin de pactar la relación bilateral entre ambas administraciones en materia de seguridad.

A esta reunión se llega tras la presentación del nuevo cuerpo policial autonómico, el despliegue de 40 agentes en las fiestas lustrales de La Palma y la exigencia por parte de la Delegación del Gobierno en las Islas y los sindicatos policiales de que los efectivos de la Policía Canaria asuman cuanto antes sus competencias exclusivas para liberar a los cerca de 70 efectivos de la Policía Nacional y la Guardia Civil que realizan labores de vigilancia de edificios, escolta de cargos públicos y custodia de menores.

La pretensión del Gobierno autónomo es coordinarse directamente con Interior, entre otras cosas para alcanzar un acuerdo político con el Estado necesario para el futuro despliegue de la Policía Canaria, ya que el Ejecutivo regional pretende alcanzar los 1.700 efectivos contando con la participación financiera de la Administración central.

Martín Marrero criticó a la Delegación del Gobierno y a los sindicatos de la Policía Nacional y de la Guardia Civil por querer "desvirtuar" la ley y "desprestigiar" al nuevo cuerpo autonómico. Marrero recordó que no es la primera vez que cuestionan a la Policía Canaria incluso antes de que naciera y de que se promulgara la ley.

"Estos son asuntos que se tienen que tratar donde se tienen que tratar y no a base de provocar titulares periodísticos", aseguró Marrero, para reafirmar que todo lo concerniente a la coordinación de la Policía Canaria con las Fuerzas del Estado y las funciones que debe asumir cada cuerpo "lo serio es tratarlo en la Junta de Seguridad y no entrando en polémicas públicas que no llegan a ninguna parte", agregó el portavoz del Ejecutivo.