El presidente de Canarias, Paulino Rivero, exigió ayer a Madrid el control de la gestión de los aeropuertos isleños a través de una "AENA canaria" en la que está dispuesto a admitir capital privado aunque en minoría. Rivero expresó su "rechazo frontal" a que los aeropuertos canarios pierdan el control público. El presidente se mostró muy cauteloso sobre el anuncio realizado por el Gobierno central sobre el nuevo modelo aeroportuario y espera a conocer todos los detalles de la propuesta y cómo se plantea su desarrollo antes de pronunciarse sobre su aplicación concreta en el Archipiélago.

En todo caso, Rivero recibió ayer en Madrid explicaciones adicionales del ministro de Fomento, José Blanco, y del presidente de AENA, Juan Ignacio Lema, sobre el futuro modelo y aseguró que ambos habían aceptado la idea de una "gestión singularizada" para los aeropuertos canarios a partir de la creación de una especie de "AENA canaria" que garantizaría el mantenimiento de los ocho aeropuertos insulares bajo un mismo paraguas, funcionando en red, con un sistema solidario de balanza económica y de control público.

Según el presidente, ese es un anterior compromiso de Fomento que Blanco que está dispuesto a negociar en el marco de la puesta en marcha de un modelo que pretende, en el conjunto del Estado, ser más eficiente, que busca la rentabilidad y enjugar una deuda de más de 12.000 millones. "Queremos un modelo singularizado para Canarias y existe la posibilidad de crear un ente diferenciado, una especie de AENA canaria donde pueda participar el Estado, la Comunidad Autónoma y las corporaciones locales que estén afectadas por esos aeropuertos y creo que podemos encauzar este asunto de una forma razonable", afirmó Paulino Rivero tras un breve encuentro con Blanco y Lema. "Podemos instrumentar un acuerdo que se acomode a las necesidades que tiene Canarias", recalcó.

Mismo esquema

Rivero exige, en este sentido, que los ochos aeropuertos canarios "estén bajo el mismo esquema de gestión, sin distinción entre los aeropuertos grandes y los pequeños". "De la misma manera que el Ministerio de Fomento quiere mantener en el ámbito de todo el Estado algunos instrumentos que permitan garantizar los equilibrios solidarios entre los distintos aeropuertos para que no se desarticule el sistema, Canarias quiere un sistema de gestión con ese mismo espíritu de balance, de equilibrio y de solidaridad entre aquellos aeropuertos del Archipiélago que por su volumen generan beneficio y aquellos que son deficitarios". Según el presidente, hay en este sentido "un espacio importante para crear un ente de gestión común en la que estarán el Estado y la Comunidad Autónoma".