En el 30% de los expedientes de regulación de empleo (ERE) no se justifican las causas. ¿Dejan que desear los empresarios canarios?

No. Yo siempre busco la parte positiva. En todo caso la irresponsabilidad será solo de una parte del empresariado. Jamás me gusta generalizar. El porcentaje nos dice que tenemos unos empresarios responsables y hay una parte que no lo son.

Antes de aprobarse la reforma laboral avisaba de que produciría despidos en masa.

Yo y el propio PP

¿Mantiene que eso es lo que ha producido?

Es que recuerdo que eran los propios populares los que avisaban de que iba a haber unos 600.000 despidos. Cuando ahora hablan creo que piensan que no tenemos memoria. Ellos mismos dijeron que era para despedir.

¿Ayudaría la adopción de medidas anticíclicas?

Claro. No solo lo digo yo, lo dicen muchos expertos. La crisis en principio era económica, pero ahora es ideológica. Ha servido a la derecha española y europea para aplicar su ideología. Se están cargando el Estado de bienestar. Todas las conquistas sociales que nos ha costado muchísimos años implantar se las están cargando.

¿Esperaba otra cosa del primer año de Gobierno del PP?

Ni en las peores pesadillas pensaba que un gobierno de derechas iba a hacer todo lo que han hecho estos en tan pocos meses. Se han cargado todo, empezando por la parte que más sufro yo todos los días en la dirección general: los despidos y los derechos laborales. Nos dejan casi sin derechos.

¿En esto sí cabe generalizar?

Sanidad, Dependencia... Bueno, Mujer. Están atentando contra las conquistas de los derechos de las mujeres. Eso es pura ideología, porque que decidan sobre mi cuerpo no les da ni les quita dinero.

¿Quiere decir que la crisis ya no es económica?

En principio fue económica, pero ahora es la derecha la que está haciendo que sea económica para que paguemos los que nos hemos dedicado a trabajar toda la vida. Podrían hacer muchas más políticas sociales, pero se niegan a instaurar impuestos progresivos y a proteger a quienes menos derechos tienen. Esto no es una maldición divina, es fruto de la aplicación de una política de la derecha más reaccionaria, que está en contra de cualquier conquista social.

Ustedes también han perdido competencias con la reforma laboral. Ya no median como antes.

Cuando llegamos a la Dirección General de Trabajo mi asombro fue que teníamos licenciados en derecho, pero no economistas. Mi primera preocupación fue dotarnos de funcionarios que supieran evaluar y analizar las cuentas, porque si no, es imposible llegar al fondo del asunto. La mayoría de los ERE que se han presentado últimamente han sido por circunstancias económicas. A pesar de que nos hayan quitado las competencias no hemos mirado para otro lado. Aparte de decir que esa ley no nos gusta, hemos elaborado un protocolo interno donde se siguen analizando las cuentas para intentar mediar. Y si no se media, al menos el trabajador que se siente afectado va a la jurisdicción social con un informe económico de la Administración Pública. Podríamos no hacer nada, como el resto de comunidades, pero nos negamos. Cuando se declara nulo el ERE, los trabajadores pueden volver a sus puestos de trabajo y se les pagan los salarios de tramitación. Merece la pena no estarse quieto.

¿No hay nada que hacer para contener el desempleo, para crear trabajo?

Con estas políticas de austeridad no vislumbro ningún sector capaz de absorber la cantidad de personas que tenemos en desempleo en Canarias. La alternativa es ir buscando pequeñas cosas que generen empleo.

¿Por ejemplo?

Hemos abierto las mesas técnicas de economía sumergida. Entendíamos que era importante cuantificar en cifras y números los empleos no aflorados. Cuidado, jamás he hablado a este respecto de desempleados, sino de puestos de trabajo no aflorados, que también pueden ocupar las personas que están en activo.

¿Se puede hacer aflorar?

Hay dos vías. La primera es la aplicación pura y dura de la legislación cuando la vulneración y la infracción son patentes y flagrantes. Por ejemplo, me estoy refiriendo a contratar a una persona por cuatro horas y tenerla trabajando diez. La otra es el empleo de subsistencia, por ejemplo el de la Dependencia. Rajoy ha quitado todas las subvenciones e incentivos económicos de la ley de dependencia, pero los dependientes siguen existiendo y necesitan apoyo y ayuda. Se les está prestando atención con empleo no declarado y entendíamos que en esa actividad, como en muchas otras, es susceptible de aflorar el empleo a través de la economía social. Lo primero que hemos hecho para convertir ese empleo sumergido en economía social es el texto legal que ya tiene en su poder el Gobierno.

Se hace difícil pensar que una ley cree empleo.

Es que no lo hace si no tiene detrás un plan de actuación que la respalde. Por eso vamos a convocar una mesa técnica dentro del Consejo de Relaciones Laborales para diseñar las líneas de actuación, tanto en emprendimiento como en economía social.

La economía social no tiene precisamente en Canarias su mejor nicho. ¿Por qué?

Es cierto que en las Islas no supone más que el 4% del empleo, mientras que la media del país es del 14% y en el País Vasco alcanza el 54%. El objetivo que nos fijamos es alcanzar la media nacional. Quizá no se ha creído en ella y no se le ha impulsado los suficiente. Hubo un auge con Felipe González y después decayó por falta de apoyo a la gestión. Las cooperativas son otro mundo y hay que formar mucho a las personas que trabajan allí, que sepan que no es lo mismo que trabajar en una sociedad mercantil. Ahora se impulsan porque han resistido muy bien esta crisis.

¿Cuál es la diferencia?

Las cooperativas priman a las personas, mientras que en las sociedades mercantiles prima el capital y la persona es tratada casi como mercancía. Cuando se pierde se prescinde de trabajadores, mientras que en una cooperativa perdemos todos y nos ajustamos todos y no precisamente por la parte más débil. Aparte está ese espíritu de autogestión, que tiene mucho que ver con mi partido, con lo cual yo estoy encantada de poder potenciar este tipo de economía.

Que me decía antes es incapaz de absorber todo el desempleo.

No vamos a absorber todo el desempleo, desde luego que no. Y que cualquier actividad sirve para cooperativa, pues tampoco. Pero ya tenemos por lo menos bloques de iniciativas que puedan de alguna manera frenar el paro. La crisis ha provocado que en 2007 tuviéramos 70 ERE y este año llevemos casi 500.

¿En qué medida hacer aflorar el empleo atenúa los efectos de la crisis?

No se trata solo de atenuarlos, también es útil para crear empleo de calidad. La economía sumergida y el empleo no declarado tienen dos efectos importantes. Por un lado va contra el trabajador, poniéndolo en una situación de vulnerabilidad, por ejemplo teniéndolo sin contrato. Por el otro, atenta contra las empresas que cumplen son sus obligaciones fiscales y laborales, que padecen así una franca competencia desleal. Y de paso nos perjudican a todos, porque nos fastidian el Estado de Bienestar. Pagan menos impuestos, incumplen con las cuotas a la Seguridad Social y al final lo sufrimos todos y en Canarias es una cantidad importante, más que el presupuesto de la comunidad autónoma. Yo entiendo que es una obligación del Gobierno plantar cara y crear una línea de actuación.

¿Podrá acabar con esas ilegalidades?

No se va a terminar con esto en un año, pero por lo menos debemos planificar.

¿Economía y empleo sumergidos crecen y se alimentan de la propia crisis?

Claro y lo dicen estudios. El problema estructural puede estar fijado en el 10% y en épocas de crisis se incrementa. Por eso entiendo que en momentos como estos el Gobierno debe estar al lado del más débil. No podemos abandonarlos a su suerte. En este momento tenemos que tener más presencia en las empresas, en la inspección, que no es solo sanción, también advierte y requiere. Eso sí, a la tercera vez no pretendas que te adviertan. Quiero decir que no es con ánimo de recaudar, sino de estar presente y recordando continuamente las obligaciones mínimas tanto en salud laboral como en cumplimiento de contrato.

¿Por qué tenemos tasas altas de siniestralidad laboral?

Hay una reflexión que yo me hice nada más llegar. Cómo siendo una comunidad autónoma con una tasa de paro importante, también la tenemos de siniestralidad. Estoy encantada con mis funcionarios porque trabajan divinamente. Nos planteamos un plan de choque a lo largo de 2011 que estamos terminando de ejecutar y evaluar. Queríamos reducir la siniestralidad un 8% y ya vamos por un 16%.