Los recortes en el presupuesto de la Comunidad Autónoma iniciados en 2008 han supuesto una caída media del gasto público de 718 euros por habitante, cantidad que llegará a los 774 euros en 2014 para cumplir con el objetivo del déficit, que será del 1% el próximo año. En números absolutos el ajuste supera los 1.500 millones de euros en estos últimos cinco años si se suma el presupuesto de los distintos departamentos del Gobierno regional y el de los organismos autónomos, entidades y empresas públicas.

Este descenso del gasto público per cápita se ha traducido en un debilitamiento de las prestaciones que reciben los canarios de la Administración, es decir, servicios, inversiones y ayudas. Sólo en los servicios públicos más esenciales el ajuste ha sido superior a los 300 millones de euros en Sanidad y sobre los 170 millones en Educación desde el año 2008.

A los recortes del presupuesto como consecuencia de la crisis se ha sumado un sistema de financiación que castiga especialmente al Archipiélago al ser la Comunidad peor financiada (268 euros por debajo de la media por habitante) y el cumplimiento del objetivo de déficit, que ha provocado que la capacidad de endeudamiento sea menor para financiar las cuentas. A esta situación hay que añadir los presupuestos del Estado de 2012 y 2013, con una caída de las inversiones y transferencias del Estado destinadas a Canarias.

El Archipiélago es una de las comunidades más cumplidoras tanto en la deuda per cápita como en el objetivo del déficit, por lo que afronta con más ventaja los nuevos ajustes que deben realizar las autonomías hasta 2016 para cumplir con los nuevos criterios aprobados a finales de julio por el Consejo de Política Fiscal y Financiera.

De esta forma, una comunidad como Valencia tendrá que recortar en 2013 y 2014 un total de 2.521 millones de euros para cumplir con el déficit, ajuste que costará a cada valenciano 491 euros menos de gasto público, el mayor recorte del conjunto de las autonomías. Sin embargo, el impacto para Canarias será mucho menor al haber cumplido en los últimos años con los criterios del endeudamiento y reducir el gasto de manera importante. Por ello, el ajuste añadido le supondrá en dos años 120 millones de euros menos, lo que se traduce en una caída de 56,8 euros por cada canario.

La situación de las tres autonomías peor tratadas por el sistema de financiación no es comparable ya que a Valencia se añade Murcia, cuyo sacrificio en los dos próximos años le supone un ajuste añadido de 580 millones de euros menos y 393,4 euros por habitante.

Otras comunidades salen incluso beneficiadas ya que regiones como Extremadura tienen un saldo positivo de 50 millones y el ajuste de otras está por debajo del que debe realizar Canarias, caso de La Rioja (-5 millones), Cantabria (-13) o Asturias (-17).

La flexibilización del déficit pactada entre el Estado y las comunidades autónomas sólo supone un respiro de unos meses ya que Canarias contará con 200 millones de euros más para gastar antes del 31 de diciembre. Sin embargo, ya para los presupuestos de 2014 y los dos años posteriores se tendrán que ceñir a los porcentajes estipulados, es decir, el 1% el próximo año; el 0,7% en 2015 y el 0,2% en 2016.

Una de las medidas más importantes adoptadas por la Comunidad Autónoma para frenar la caída de ingresos fue el incremento generalizado de los impuestos aprobado a mediados del pasado año y que ha frenado el impacto negativo sobre las cuentas autonómicas en el primer semestre de este año.