Una semana después de haber hecho efectiva su baja como militante del Partido Popular (PP), el presidente del Cabildo, José Miguel Bravo de Laguna, se presentó ayer en el Paraninfo de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria como el líder de la coalición electoral Unidos por Gran Canaria, y con la que intentará en las elecciones del 24 de mayo volver a tomar las riendas de la Casa Palacio. Ante un salón de actos abarrotado de simpatizantes de Compromiso, Partido Demócrata Progresista, y sobre todo de Ciuca, que consiguió movilizar a sus bases de Telde y Mogán, Bravo de Laguna emuló en su discurso a Martín Luther King. La frase "tengo un sueño", que el pastor estadounidense lanzó en Washington en 1963,en su defensa de la libertad, la repitió una y otra vez el presidente de Cabildo para explicar los retos que se ha marcado como impulsor de la plataforma Unidos por Gran Canaria.

"Tengo un sueño, que se puede hacer realidad si el 24 de mayo cambia el panorama político, de Canarias y de Gran Canaria, y por fin se consolida una fuerza política que piense en esta isla y que defienda esta isla y que ayude a la región canaria", enfatizó el presidente del Cabildo. Con este comienzo ya consiguió arrancar los aplausos de todos los asistentes. En los quince minutos que se prolongó su intervención no dejó de ser ovacionado.

Pero, Bravo de Laguna no paró de soñar, y entre esas añorazas y deseos confesó que espera que "Gran Canaria aumente su prosperidad, que los jóvenes tengan empleo, que los niños tengan una buena educación y los mayores sean respetados y valorados, y que las empresas creen actividad, y que la isla sea el motor del Archipiélago, pese a que es la isla más solidaria".

También declaró que tiene la ilusión de que Gran Canaria sea una isla limpia y ecológica, y que preseverse sus espacios naturales como el Oasis de Maspalomas, "el único que existe en Europa, y que han querido destruir, y por eso desde el Cabildo me he opuesto. Parece que eso es un pecado que no me perdonan, pero que pese a todo voy a seguir defendiendo." Bravo de Laguna no paró de recibir ovaciones. Una de esas veces fue cuando dijo "que no se puede permitir que Tenerife reciba un millón más de turistas", pues, según defendió, si Gran Canaria logra elevar en esa proporción la entrada de visitantes puede crear 30.000 empleos. También al recordar que, pese a que le acusan de pleitismo, fue gracias a la lucha de los grancanarios como se consiguió la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria.

El presidente del Cabildo, convertido anoche en el líder de Unidos por Gran Canaria, advirtió que esta coalición "no va aceptar que haya una isla principal y seis satélites". Pero hubo momentos que asumió el papel de presidente del Cabildo, y lo hizo para enumerar sus hazañas como el Gran Canaria Arenas o la ayuda económica a la obra de la carretera de La Aldea.

Concluyó Bravo de Laguna anunciando que va a realizar una campaña electoral "sin responder a insultos, ni a acusaciones de partidos, y sin entrar en peleas barriobajeras", tras agrader todas las alabanzas que le hicieron sus compañeros de coalición.

Guillermo Reyes, secretario geneal de Ciuca le dijo: "el tsunami que has impulsado lo estábamos esperando"; Francisco Pérez, presidente de Compromiso por Gran Canaria, aseguró que Bravo "representa la oportunidad de que Gran Canaria recupere su papel político y social; y el presidente del Partido Demócrata, Aladino Suárez, le llamó "mi presidente". Representantes vecinales como Oscar Roque, y deportivos como Juan Manuel Campos, también le auparon.