El Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) ha emitido una sentencia por la cual suspende la construcción de la planta regasificadora de Enagás en Granadilla (Tenerife) debido a que falta un estudio de impacto ambiental, ha informado este martes el abogado Isidro López.

Abogado de la Plataforma Ciudadana contra el puerto de Granadilla, Isidro López ha manifestado a EFE que la sentencia del TSJM anula la autorización administrativa para construir la regasificadora, y también la declaración de impacto ambiental presentada. Enagás tiene diez días para recurrir esta sentencia ante el Tribunal Supremo, y fuentes de la empresa han dicho también a EFE que están evaluando en detalle los efectos de la sentencia.

El abogado Isidro López, que este martes ofreció una rueda de prensa en la capital tinerfeña para explicar esta sentencia emitida el 16 de marzo, ha declarado que el tribunal ha estimado el recurso de la plataforma porque no hay un estudio independiente del efecto acumulativo que tendría la instalación de industrias en el puerto de Granadilla. Explicó Isidro López que para el tribunal no vale con hacer un estudio de los vertidos que tendría la planta de gas, sino que es preciso unir a los mismos los que procederán de la central térmica y también los del resto de industrias que se instalen en el polígono de ese municipio del sur de la isla. Ese informe es un requisito decisivo y por ello el tribunal ha anulado tanto la autorización para construir como la declaración de impacto ambiental, por lo que habrá que empezar casi desde cero, ha opinado el abogado, quien ha comentado que a partir de ahora Enagás y Gobierno canario tendrán que demostrar que tienen razón, mientras que hasta ahora tenía que hacerlo la plataforma. Isidro López denunció que en este tipo de cuestiones hay una relación asimétrica entre demandante y demandado, de forma que el primero tiene muchos menos recursos económicos que el segundo para presentar pruebas.

Así, en este caso demandan unos vecinos y un abogado y en la otra parte está una gran empresa con un gran equipo de abogados y muchos medios económicos. Esta situación de asimetría ha hecho que la plataforma no haya podido presentar pruebas en relación a que el agua de la regasificadora, que estará entre tres y cinco grados centígrados menos que la del mar próximo, y además mezclada con cloro, afectará tanto a la fauna como a la flora de la zona.

Esta sentencia fue emitida dos días antes de que el presidente de Enagás, Antonio Llardén, anunciase que las obras de construcción de la regasificadora de Granadilla de Abona comenzarán en el segundo semestre del año, con una inversión de unos 300 millones de euros. Si bien la sentencia fue emitida el 16 de marzo no se comunicó a las partes hasta la semana pasada. Enagás tiene el compromiso de construir dos regasificadoras en Canarias, en aplicación de la reforma de la ley que regula los sistemas energéticos extrapeninsulares.