Nueva Canarias no está dispuesta a prestar su escaño en el Congreso de los Diputados para facilitar la investidura de Mariano Rajoy como presidente del Gobierno. La cúpula del partido nacionalista descartó ayer apoyar al Partido Popular, ya sea votando a favor o absteniéndose. Impone a su diputado electo, Pedro Quevedo, un veto sin condiciones a Rajoy. "Ni por activa ni por pasiva" le haremos presidente, anunció el líder de NC, Román Rodríguez, que reprochó a los populares el "maltrato continuado" al Archipiélago. Los nacionalistas no se fían del PP y advierten de que no cederán a "ningún chantaje".

Un día después de que el diputado de Nueva Canarias Pedro Quevedo planteara la posibilidad de dar su respaldo a Rajoy si el PSOE y la dirección de su partido lo autorizaba para evitar unas terceras elecciones, el núcleo duro de la organización nacionalista rechazó de plano esta opción.

El presidente de NC, Román Rodríguez, aseguró que esta formación "no puede apoyar" al candidato conservador porque "representa y practica todo" lo que esta formación ha combatido, "desde el maltrato continuado a Canarias, como ningún otro gobierno de la etapa democrática, a la política de la austeridad, el deterioro del estado del bienestar, la pérdida de las libertades y de los derechos ciudadanos, la tolerancia con la corrupción y, por último, el uso partidista de la Administración estatal contra sus adversarios políticos".

"En Nueva Canarias -continuó no nos fiamos ni de Rajoy ni del PP". En la pasada legislatura, "incumplió todos los compromisos" que adquirió con Canarias en el discurso de su investidura del año 2011, argumentó Rodríguez.

Ejecutiva nacional

En este punto, dejó claro que NC, en una hipotética investidura de Mariano Rajoy a la Presidencia del Ejecutivo central "votaría en contra". Rodríguez insistió en que el partido que dirige desde 2005 tiene un "único compromiso con los electores, la defensa del programa de cambio político y por la agenda canaria acordado con el PSOE, que conlleva el apoyo a la investidura de su secretario general, Pedro Sánchez, si se diera el caso".

Estos planteamientos serán expuestos por Rodríguez en la ejecutiva nacional que se celebrará este viernes y donde se prevé que concite el respaldo mayoritario de la dirección.

A su entender, tras los resultados del domingo, la primera condición para empezar a formar una mayoría de gobierno es que el jefe del Estado, Felipe VI, proponga al candidato a la investidura como presidente, tras haberse entrevistado con los representantes de las distintas formaciones políticas con representación en la Cámara Baja.

Nueva Canarias, como hizo tras los comicios del 20 de diciembre, volverá a proponer al Rey que Mariano Rajoy "asuma su responsabilidad y haga el trabajo que le corresponde, aunque no lo tenemos claro, visto el precedente de hace seis meses cuando renunció", apuntó el presidente de los nacionalistas de izquierdas, para quien Rajoy "tiene que hacer su tarea".

Con sus palabras Román Rodríguez zanja el posicionamiento de NC en torno al voto de Pedro Quevedo, que se ha convertido en protagonista involuntario estos días, en la medida en que la aritmética parlamentaria le situaba como el diputado que puede garantizar o no la mayoría necesaria al PP para seguir gobernando España.

Mientras Coalición Canaria se mostró desde el primer minuto abierta a una negociación con el partido más votado, el diputado, que concurrió como número dos en la coalición electoral PSOE-NC no descartó el lunes abstenerse para evitar una tercera cita con las urnas. "Lo que no vamos a hacer seguro es votar a favor de una investidura posible de Rajoy. La hipótesis de una abstención tendría que depender de un análisis general en el que se dice no se puede ir a unas terceras elecciones y tendría que haber un voto crítico de dejar gobernar, si eso fuese el análisis que compartimos con el PSOE y lo ve la dirección de NC pudiera ser una posición", aseguró a los medios de comunicación hace dos días el también concejal y segundo teniente de alcalde del Ayuntamiento de la capital grancanaria, donde gobierna en un tripartito con los socialistas y Las Palmas Puede, filial de Podemos.

Sin embargo, horas después Quevedo reculó. "Vaya operación de intoxicación con el voto de Nueva Canarias a la investidura de Mariano Rajoy. En ningún caso apoyaremos un gobierno del PP", dijo a través de su cuenta de Twitter. Con ello aclaró sus ambiguas declaraciones y, en la misma línea que Román Rodríguez, admitió que cuando el Rey le cite, le propondrá que encomiende a Rajoy que trate de formar gobierno para conocer así "el programa de gobierno que el PP ha estado ocultando". "Confiemos que no vuelva a hacer la cobra frente al encargo", agrega el diputado en la red social.

Ya sin ambages, Quevedo reconoció a través de otro tuit que apoyar al PP "sería una renuncia a nuestros principios, al acuerdo con el PSOE y, sobre todo, a la gente que nos apoyó". De esta forma disipó las dudas sobre el sentido de su voto.

La mera conjetura de que Quevedo se abstenga en una eventual investidura de Rajoy suscitó movimientos en el seno de NC, que gobierna en alianza con el PSOE y Podemos en el Cabildo de Gran Canaria y en la capital.

Pero la abstención "no está dentro de las previsiones de Nueva Canarias", se apresuró a despejar ayer el secretario de Organización de NC, Carmelo Ramírez, que insistió en que durante la campaña electoral esta formación se manifestó "claramente por un cambio de gobierno y de políticas". En declaraciones a la Cadena Ser, insistió en que "no entra de los parámetros políticos que Nueva Canarias vaya a facilitar ni directa ni indirectamente la presidencia de un gobierno encabezado por Rajoy".

Ramírez explicó que en "los últimos años los recortes, la reforma laboral, la pobreza y la exclusión social, que han aumentado con el gobierno del PP, y el maltrato al que se ha sometido a Canarias", hacen que NC no se esté "planteando ni mucho menos el apoyo por la vía directa o indirecta para que continúe esta misma política". "Además de los numerosos casos de corrupción que, a pesar de los resultados, invalidan al PP para seguir gobernando este país", añadió el dirigente de NC, que incidió en que esta organización "no va a facilitar operaciones alambicadas" en favor del PP y apostó por otra mayoría con el PSOE, Podemos y Ciudadanos.

"Está absolutamente descartado que se pueda usar un voto de NC para permitir un gobierno del PP", afirmó el presidente del Cabildo, Antonio Morales, que se mostró "convencido" de que en ningún momento Quevedo romperá la disciplina del partido. Cuestionado sobre si NC cambiará de opinión si el PP se compromete a satisfacer las demandas de las Islas en infraestructuras o en el impulso de las energías renovables, expuso que "el compromiso" adquirido por Nueva Canarias con quienes secundaron su lista electoral junto con el l PSOE "no se puede quebrar a cambio de platos de lentejas".

Bajo las mismas siglas, la alcaldesa de Santa Lucía, Dunia González, fue tajante: "De ninguna manera podemos apoyar un gobierno de derechas, ni a favor ni absteniéndonos". "No les vamos a apoyar por lealtad también a nuestros valores y por respeto a nuestros votantes".

"Chantajes"

"Los chantajes valen para un día o un año y eso significa vender tus principios y yo no estoy dispuesta, como nacionalista de izquierdas, a vender mis principios por millones de euros que puedan venir para carreteras o infraestructuras. Eso es un grave error para cualquier proyecto y pasa factura", dijo.

González reivindicó la "autonomía" de NC para decidir sobre el voto de Quevedo. "No debe haber un consenso con el PSOE sobre qué se vota", señaló. Visión contraria tiene el alcalde de Agüimes, Óscar Hernández, que estima que "habrá que hablarlo con los socialistas". "Me parecería una deslealtad absoluta no contar con nuestros socios hasta ayer para tomar una decisión ahora de forma unilateral", resaltó el regidor, que coincidió en que "en ningún caso NC debe apoyar un gobierno del PP".

Con todo, habrá que esperar al desarrollo de los acontecimientos en el conjunto del país.