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Ferraz descarta autorizar un adelanto del congreso para relevar a Pérez

La intención del secretario general de abandonar ya el cargo aboca al partido a una gestora P López Aguilar apuesta por la bicefalia para rehacer el PSC

De izquierda a derecha: Patricia Hernández, Pedro Sánchez y Fernando Clavijo. LP / DLP

La dirección federal del PSOE no contempla bajo ninguna circunstancia un escenario de adelanto del congreso regional de los socialistas canarios y que éste pudiera tener lugar antes del que debe celebrarse en el ámbito federal el próximo otoño, en una fecha que el Comité Federal del partido fijará en su reunión del próximo día 9. Fuentes de la dirección de Ferraz aseguran que al menos hasta este momento no consta ninguna petición al respecto por parte del aún secretario general del PSC, José Miguel Pérez, y que en todo caso no se contempla ninguna modificación del calendario orgánico previsto, ni que ninguno de los congresos territoriales en todo el Estado que deben seguir al cónclave federal vaya a cambiar de fechas por circunstancias puntuales en las distintas federaciones.

Aunque en Madrid se conoce desde hace tiempo la decisión de Pérez de no presentarse a la reelección para seguir liderando a los socialistas canarios, y son conscientes de su deseo de abandonar cuanto antes sus actuales responsabilidades en el partido y la vida política activa para desarrollar su trabajo como profesor en la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC), el equipo de la secretaria de Organización, que dirige César Luena, se muestra convencido de que se mantendrá en el puesto aún los meses que restan para ese proceso.

Con todo reconocen que una dimisión obligaría a "aplicar los estatutos" y a nombrar a una gestora que llevaría adelante la preparación del congreso regional. Nunca, en todo caso, se está pensando en una "dispensa" para adelantar la asamblea regional del partido tal como Pérez sugirió el pasado miércoles ante la ejecutiva regional que iba a solicitar ante la dirección federal alegando "cansancio" y "fin de ciclo".

Con todo, la marcha de Pérez como muy tarde para finales de año, abre el proceso de sucesión en medio de una crisis importante en el partido tanto en el ámbito electoral, como orgánico y de vida interna. Los pésimos resultados del pasado 26J, en los que perdió un escaño por Sana Cruz de Tenerife respecto a los ya malos del 20D, inciden aún más en las divisiones en relación a distintos asuntos de la política canaria, así como la total ausencia de comunicación entre la dirección, el grupo parlamentario y los miembros socialistas en el Ejecutivo. Sobre este marco, los distintos sectores tratan de posicionarse en el proceso de relevo de Pérez, pero aún pendientes de si el inminente y previo congreso federal conlleva o no el adiós del actual secretario general, Pedro Sánchez, y el advenimiento de un nuevo liderazgo, quizá en la figura de Susana Díaz, la presidenta de Andalucía.

Nuevo liderazgo

Hasta la fecha, nadie en el PSC ha dado el paso formal de anunciar su candidatura para hacerse con el futuro liderazgo en el PSC. Se da por hecho que sí lo hará la actual vicepresidenta del Gobierno regional, Patricia Hernández, que tiene apoyos importantes en distintas islas pero que, además de no contar con la unanimidad en Canarias, tampoco lo tiene explícitamente de la actual dirección de Ferraz, que podría apostar por una hipotética candidatura del diputado nacional y concejal de la capital grancanaria Sebastián Franquis. Una hipotético nuevo liderazgo de Díaz, sin embargo, facilitaría el camino a Hernández.

En este contexto, el eurodiputado y ex ministro Juan Fernando López Aguilar, que además ya fue secretario general del partido entre 2007 y 2010, se declaró ayer abiertamente decidido a participar en este proceso sin descartar ninguna opción. "No es momento ni de decidirlo, ni de expresarlo, pero no soy indulgente ante la situación que vive el partido. Todas las opciones están abiertas. Es un trabajo de colectivo que debe hacerse en equipo. Quiero participar en un trabajo de aunar al PSOE en Canarias y relanzarlo", afirmó.

López Aguilar apuesta abiertamente por la bicefalia como posible fórmula de futuro para un partido que necesita "rehacerse" y para tratar, a través de una nueva organización y nuevos métodos de comunicación con la sociedad, de recuperar el espacio social y electoral que ha perdido en los últimos años.

"Hay que repartir tareas y papeles. Hay que valorar que algunos se dediquen a rehacer el partido y otros puedan dar la cara electoral. La bicefalia no es una fórmula descabellada", subrayó. El eurodiputado ya manifestó abiertamente en febrero pasado su plena disposición a volver a la vida orgánica del PSC y sopesaba ya entonces hacer tándem para la dirección regional con Patricia Hernández, con quien tiene afinidad política y a la que apoyó en las primarias para la candidatura a la presidencia regional en las autonómicas. Ahora, el también exministro parece dar una vuelta de rosca más al argumento de la división de tareas. "Todo el partido ha padecido un vacío de liderazgo que se está dejando notar y ha dejado de tomar posicionamiento sobre cuestiones troncales en Canarias. Hay un deshilachamiento de la visión pancanaria que ha sido suplido por grupúsculos localizados sin una mirada global de partido ni sobre asuntos importantes del debate social de las Islas", señala de forma crítica el eurodiputado.

Según él, "los resultados del 26J son muy insatisfactorios y no participo de la autoindulgencia de relativizarlo por el hecho de que en esta ocasión quienes nos persiguen no nos hayan adelantado, porque lo pueden hacer en la siguiente curva". "Son resultados muy lejos de los que ha sido el PSOE, y lo que debe ser", afirma López Aguilar, quien asegura que "lo razonable es que vayamos a un congreso en su calendario orgánico después del federal". Según él, Pérez "debe permanecer hasta esa fecha". "No deseo que dimita, pero si lo hace, los estatutos dicen claramente que la ejecutiva federal nombrará una gestora para llevar el partido hasta el congreso regional".

López insiste en su conocido discurso crítico con la situación del partido tanto en Canarias como en el conjunto de España, pero subraya que la respuesta no es en ningún caso "hacer saltar un fusible en forma de un secretario general u otro porque todo el partido ha fallado". La situación actual, asegura, "no es responsabilidad exclusiva de un secretario general u otro, sino de nuestro modelo de organización y de comunicación y relación con los ciudadanos, que ya no sirve, porque los electores ven una contradicción entre los que decimos y como nos comportamos". "Hay que reinventar el partido, cambiar métodos de trabajo, de organización, de comunicación con los ciudadanos y quiero ser parte de eso y me dispongo a participar. Estoy involucrado", resalta. "El emplazamiento es colectivo. Todo el PSOE se lo tiene que mirar y quiero ser parte de este debate y de ese proceso", insiste.

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