La sentencia de la Audiencia Provincial de Barcelona que incrementó las indemnizaciones que deben recibir los familiares de una de las víctimas del accidente aéreo del JK5022 no será la última que falle un tribunal sobre las compensaciones que Mapfre, aseguradora de la extinta Spanair, debe abonar a los afectados por el siniestro. Ocho años después de que un MD-82 de la desaparecida aerolínea, con 172 personas a bordo, se estrellase en Barajas instantes después de despegar, aún quedan 21 casos abiertos. Éstos, según fuentes de la compañía de seguros, no corresponden a familiares de 21 víctimas, ya que, además de demandas particulares, hay algunas conjuntas y duplicadas en diferentes juzgados.
De los procesos que están pendientes de resolución, una parte se encuentra en juzgados de primera instancia, otros en vista previa y el resto está a la espera de los pronunciamientos de diferentes audiencias provinciales.
El próximo sábado se conmemora el octavo aniversario de la tragedia, que dejó 154 fallecidos y 18 heridos de diversa consideración. Desde entonces, los familiares de las víctimas luchan para que el criterio que impere a la hora de calcular las cuantías de las indemnizaciones por este siniestro sea la normativa europea, que agrupa leyes sobre aviación internacional procedentes del Convenio de Montreal, y no el baremo de daños de uso general para los siniestros de tráfico empleado en quince sentencias sobre el JK5022.
El reglamento comunitario, que recoge que "no hay límite económico fijado para la responsabilidad en caso de lesiones o muerte del pasajero", fue el que utilizó, por primera vez en España, la Audiencia Provincial de Barcelona en su fallo, con lo que la aseguradora tendrá que pagar a los padres y a la hermana de una de las víctimas más de 600.000 euros, una cantidad que duplica la fijada en primera instancia (340.000 euros).
Los familiares de los fallecidos o supervivientes que hayan pactado una indemnización con Mapfre, o aquellos cuyos casos judiciales estén ya cerrados, no tienen posibilidad de reclamar para que se les aplique este criterio, según fuentes jurídicas consultadas.
Tras conocer el fallo de la Audiencia Provincial de Barcelona, la presidenta de la Asociación de Víctimas del Vuelo JK5022, Pilar Vera, declaró que confiaba en que el criterio empleado en el mismo alcance a las resoluciones de los recursos que todavía están pendientes de sentencia. "La Justicia ya no puede pararse, tiene que extenderse, llegar a todas las familias que están litigando y adoptar un criterio unánime", insistió.
Los tribunales que aún tienen que determinar el volumen de las compensaciones en 21 procesos podrían tomar, a juicio de los juristas consultados, ese fallo como referencia. Es más, según las mismas fuentes, las indemnizaciones podrían ser mayores en aquellos casos en los que las víctimas fueran el sostén económico de las familias que ahora, ocho años después del siniestro, siguen luchando en los juzgados.
La aseguradora, por su parte, ha pedido una aclaración de la decisión del juez y valora recurrir la sentencia por ser "sustancialmente distinta a lo que han dicho quince jueces sobre el mismo caso y los mismos hechos". La pauta defendida por Mapfre, según fuentes de la compañía, coincide con la que marca el Tribunal Supremo en caso de siniestros: la aplicación del baremo de accidentes. En cualquier caso, la aseguradora insiste en que lo importante es poder indemnizar a las víctimas y que pagarán las cuantías que los jueces determinen en los procesos que quedan pendientes de sentencia, "con independencia de que luego se recurra o no".
Mapfre afirma que ya ha indemnizado a casi el 90% de los afectados del siniestro. El total de las indemnizaciones abonadas asciende a 34 millones de euros.
