La consejera de Hacienda del Gobierno canario, Rosa Dávila, defendió ayer en comisión parlamentaria el presupuesto del próximo año, que tildó de "magnífico" porque permite mantener los servicios públicos esenciales y profundizar en el desarrollo económico y la creación de empleo. Sin embargo, los grupos de la oposición parlamentaria -Podemos, Nueva Canarias y PP- tacharon las cuentas de "fracaso seguro", "ciencia ficción" y "malas".

El presupuesto crecerá un 4% hasta los 7.300,5 millones de euros, lo que supone el mayor aumento desde 2011 -69,5 millones- y con un 80% del total destinado a gasto social, si bien si no se tiene en cuenta el pago de la deuda, el aumento presupuestario alcanza los 252 millones de euros, al pasar de 6.345,7 millones de euros a 6.597,8 para el próximo año, tras contabilizar los 160 millones del Fdcan que no figuraban en el presupuesto inicial.

Las cuentas de la Comunidad Autónoma destinarán 5.250 millones a los servicios públicos, entre los que se encuentran 75 millones más para Sanidad -192 más que en 2011-; 152 para dependencia -la cifra más alta de la historia- y 42 millones adicionales en Educación. En total, el presupuesto de corte social crece en torno a los 160 millones con respecto al año anterior.

Ante las críticas de los grupos parlamentarios, comentó que su Ejecutivo es "transparente" y no ha hecho ninguna "manipulación", y ha dejado la puerta abierta a presentar otra ley de crédito extraordinario el próximo año cuando se aclaren las cifras del Estado.

La diputada de ASG, Melodie Mendoza, dijo que pedir la devolución de las cuentas sería un "perjuicio" para los ciudadanos, ya que se han presentado con retraso, y valoró la "autonomía" que dan las cuentas a las administraciones locales. "Hay un cambio de sensibilidad aunque queda camino por recorrer con la suficiencia financiera", apuntó.

Román Rodríguez, portavoz de Nueva Canarias (NC), criticó el recorte de un 25% del tiempo destinado al Parlamento para estudiar el presupuesto por el "lío" del Gobierno para repartir las cuentas en el "repacto". Dijo que hay una "contención de la recuperación" por las incertidumbres internacionales y la prórroga de los presupuestos estatales, al tiempo que criticó las "inexactitudes y mentiras" de Dávila.

Noemí Santana, portavoz de Podemos, criticó también el "retraso" en la presentación de las cuentas autonómicas y tildó de "improvisados" los presupuestos. "No se los vamos a comprar", indicó. "No se le puede llamar presupuesto de las personas", apuntó, sin obviar que Dávila se ha comportado como una "trilera política", a lo que la consejera exigió respeto y que no va a faltar al respeto a ningún diputado.

Santana tildó de "barbaridad" el crecimiento del personal de confianza hasta el punto de crear una "administración paralela", y lamentó la falta de "apuesta" por los autónomos y los pequeños empresarios en favor de una "minoría de privilegiados", criticó la portavoz.

Jorge Rodríguez, del PP , aseguró que los presupuestos son "malos" y una "oportunidad perdida" para Canarias porque suponen la "continuidad" de las mismas políticas "fracasadas" de CC y PSOE. "¿A quién se le ocurre entregar Empleo a los socialistas?", preguntó. Criticó la "propaganda" de Dávila al presentar los presupuestos porque no son los que más crecen desde 2011, ya que hay que sumar la ley de crédito extraordinario y el extinto ITE, y tildó de "manipulación" las cifras de la dependencia.

Por su parte, la consejera de Obras Públicas y Transportes, Ornella Chacón, admitió ayer que las inversiones previstas en las infraestructuras viarias para 2017 se mantienen invariables en el presupuesto autonómico, pero confió en la negociación con el Estado de un nuevo convenio que garantice "una fuente de financiación firme".

Por otro lado, el consejero de Economía, Industria y Conocimiento, Pedro Ortega, aseguró ayer que el presupuesto de su departamento para 2017 es expansivo y con él se hace una apuesta por las energías renovables.