El magistrado Salvador Alba ha denunciado de nuevo ante el Consejo General del Poder Judicial, el órgano de gobierno de los jueces, a su colega Victoria Rosell por falta de respeto en una entrevista que concedió al programa El Drago, de la Cadena Ser, el pasado 13 de septiembre.
Rosell anunció ayer en ese mismo medio que el lunes recibió la denuncia y lamentó que forme parte de "una persecución" que "roza el acoso psicológico y el laboral" después de llevar un año "soportando informes" de alguien que, según subrayó, "parece no darse por vencido".
El Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) sigue adelante en las diligencias abiertas contra Rosell y Alba, relacionadas ambas con las presuntas irregularidades en la investigación que lideraron en el Juzgado de Instrucción número 8 de Las Palmas de Gran Canaria por un posible fraude fiscal cometido por el empresario Miguel Ángel Ramírez.
La magistrada se preguntó que cómo va a faltar el respeto a alguien por decir que miente o que forma parte de una campaña de descrédito. "El respeto hay que ganárselo también, pero yo pierdo la vida y la salud en informar sobre cosas que son absolutamente trampas", recalcó, al tiempo que aseguró que Alba ha tirado la imagen de la Justicia "por los suelos".
Por otro lado, Rosell calificó de "frustrante" que la Sala de Gobierno del TSJC no se haya pronunciado sobre las grabaciones de Alba y Ramírez por falta de cuórum. Apuntó, a su vez, que hay "errores evidentes" en la transcripción que la Guardia Civil -a instancias de la magistrada Margarita Varona- realizó de la conversación que Alba mantuvo con Ramírez el pasado mes de marzo y que el empresario grabó de forma clandestina.
Rosell lamenta que en ese documento se incluya a personas que no aparecen durante el diálogo o se atribuyan frases a personas que no intervienen. "No sé con qué medios lo han hecho; supongo que lo han hecho con prisa y lo han oído una o dos veces", indicó. A su juicio, todos esos errores y la no transcripción de algunas frases ininteligibles para la Guardia Civil son aprovechados por Alba "para poner el ventilador" y "hacer ver que toda la Judicatura está pringada" cuando, bajo su punto de vista, el único implicado es él.
