El Cabildo de Tenerife tendrá "vía libre" para ejecutar el cierre del anillo insular. El Gobierno canario cederá, finalmente, la delegación de la competencia en este ámbito a la corporación insular, como pedía su presidente, Carlos Alonso, lo que provocó parte de las fricciones con la consejera de Obras Públicas, Ornella Chacón, reticente en un principio a la cesión. Este es el segundo encuentro entre Alonso y Chacón, promovido por el presidente del Gobierno, Fernando Clavijo -presente en la reunión-, en busca de una solución a los problemas de tráfico en las vías de Tenerife. Clavijo destacó la importancia del acuerdo alcanzado, que permitirá solventar un problema histórico en la Isla y aseveró que, una vez más, "se evidencia que es posible llegar a acuerdos cuando nos sentamos a dialogar pensando solo en dar una respuesta a los ciudadanos que sufren, día a día, atascos interminables". La Consejería de Obras Públicas y Transportes y el Cabildo de Tenerife acordaron la creación de una comisión técnico-jurídica con el objeto de impulsar las soluciones necesarias en materia de carreteras, en concreto, las actuaciones previstas en la TF-5, la TF-1 y el cierre del anillo insular.

Según Clavijo, en el caso del cierre del anillo insular la solución acordada pasará por la delegación de la competencia al Cabildo de Tenerife y la comisión analizará el procedimiento y viabilidad, a los efectos de que se analice la conveniencia y oportunidad política en el Consejo de Gobierno.

De esta forma, el Cabildo tendrá vía libre para ejecutar la obra de acuerdo al artículo 34 de la Ley de Cabildos. La corporación insular solicitará esta delegación según el artículo 36 de la citada Ley.