El punto de partida de la función teatral es la historia de Olímpiades, interpretado por Luis Fernando Alvés, un director de marketing que a los cincuenta años es despedido porque la empresa considera que es demasiado mayor, "un activo amortizado" le dicen.

Su búsqueda desesperada de un nuevo empleo le llevará a hacerse pasar por una mujer para ayudar a unas madres de un pueblo de Salamanca que quieren realizar un calendario erótico, con el fin de obtener fondos para construir un centro de ocio para los chicos del pueblo.

Durante la obra, Serradilla del Arroyo se transforma en Cerezuelos, pero las madres de la ficción se enfrentan a los mismos miedos e inseguridades a los que se afrontaron las madres de la historia real.

Así lo reconoce Rosa Garín, una de las madres de Serradilla quien en declaraciones a EFE ha reconocido que recordar la peripecia del calendario a través de la obra "ha sido muy emocionante".

Varias de las mujeres de Serradilla acudieron al estreno y Garín disfrutó de un pequeño papel en la obra, quien ha reconocido que "durante los ensayos me daban ganas de llorar al ver el sufrimiento de las actrices con los desnudos, porque me recordaba lo mal que lo pasamos nosotras".

Sin embargo, el drama se difuminó entre las carcajadas de un público que disfrutó con el lenguaje directo de la obra, que ridiculiza los estereotipos sobre el paso de la edad de unos personajes que hablan de sexo sin tapujos.

La historia de las madres de Serradilla aún no ha terminado, aunque consiguieron pagar la deuda que les generaron los calendarios, tienen pendiente un juicio en marzo con la persona que maquetó el calendario, porque según Garín les quiere "estafar, cobrando 9.000 euros por lo que hizo".

"El problema es que ha habido gente que se ha querido forrar a nuestra costa y seguimos sin un duro para el polideportivo", ha añadido.

"Felices 30" ha abierto una fila 0 para recaudar fondos a lo largo de toda la gira, con lo que las madres de Serradilla esperan "tener el empujón suficiente para lograr lo que nos está costando tanto" ha afirmado una de las madres.

Después de la prolongada ovación que el Principal ofreció al reparto, el autor y productor de "Felices 30", Eduardo Galán, cedió el micrófono a Rosa Garín para que pusiera el telón con sus palabras. "Hemos luchado por lo más importante que hay, por nuestros hijos", concluyó la madre.