He aquí una ópera inglesa por los cuatro costados: protagonismo del mar, un pub como lugar de la acción, personajes (sobre todo femeninos) que sólo se dan en Gran Bretaña y los demás ingredientes de eso que llamamos vida inglesa. Si a esto añadimos un libreto interesante de Montagu Slater, sobre un poema de George Crabbe, con muchas dosis de suspense y una música del mejor compositor británico, Sir Benjamin Britten, no cabe duda de que estamos hablando de Peter Grimes que el Teatro Pérez Galdós presentó el jueves último.

El conjunto global puede considerarse como un gran éxito empezando por la puesta en escena con esa oscuridad y sombras como símbolo de la ignorancia en que se encuentran los personajes, que juzgan por apariencias sin evidencias claras, el carácter eminentemente inglés de cuantos intervienen en la acción y el adecuado ritmo, lento unas veces, otras más vivo, que imprimió a la acción su director escénico Oscar Cecchi dieron como resultado una puesta en escena viva y de mucha calidad, subrayada por una dirección musical de Pedro Halffter, la mejor operística que le recuerdo con unos interludios muy expresivos y sirviendo perfectamente a la acción. La OFGC, como siempre, demostró ser una magnífica orquesta de foso con mención especial para todos sus componentes.

Aparte de tres personajes, el resto de los numerosos comprimarios puede considerarse como solistas de coro, pues su actuación dramática casi siempre es corroborada por el coro, que comenta la acción como en una tragedia griega. El Coro Filarmónico Eslovaco, dirigido por Blanka Juhanáková, se convirtió en uno de los grandes triunfadores de la velada.

Todos los solistas secundarios actuaron muy bien dentro de sus respectivos papeles y, por ello, vamos a limitarnos a los cuatro más protagonistas, los dos amigos de Peter, el capitán Balstrode, interpretado por el barítono Jonatthan Summers, con algunas dificultades en el registro alto, pero que creó un gran personaje luciendo sobre todo en su dúo con Grimes, And do you prefer the storm. Amanda Roocroft, quizás la más completa del elenco solista en el papel de Ellen Orford, con magníficas intervenciones en su dúo con el protagonista y, sobre todo, en uno de los momentos culminantes de la noche el cuarteto femenino From the gutter, acompañada por la Tía, Susan Gorton, de impresionante voz y presencia escénica y de las dos pizpiretas sobrinas, muy en su papel ambas, Vanessa Goikoetxea y Elena Sancho. En cuanto al protagonista, Peter Svensson, de voz no muy bella y sin una gran línea, cantó con mucha convicción su difícil papel luciendo un pianissimo muy logrado en el inicio de Now the Great Bear y muy bien en su dúo con Ellen.

En resumen una bella noche de ópera en el teatro Pérez Galdós que nos permitió go-zar de esta magnífica obra contemporánea que, como en el vetusto dramón de Echegaray, El gran galeoto, las aparien-cias deciden por encima de la realidad.