Francisca Gracián Galbeño rememora una vida idílica en la isla Fernando Poo, perteneciente a la ex colonia española de Guinea Ecuatorial, durante su infancia en los años cuarenta, en su libro Aquellos años en Fernando Póo, que presentó anoche en el Club La Provincia.

La escritora nacida en Sevilla, pero residente desde hace 38 años en Gran Canaria, estuvo acompañada en el acto por el presidente de la Asociación de Poetas Canarios, Pedro Calicó, y la escritora Pepa Aurora, y señaló que el libro fue "un propósito de año nuevo", para narrar "la historia de mi infancia, la de mis hermanas y amigas donde pasaron tantas cosas". Todo transcurre en una isla de 2.000 habitantes en la que vivió, ya que su padre fue destinado allí como funcionario al ser taquígrafo del Gobierno.

Para Gracián Galbeño, la vida en Fernando Poo era muy diferente en los años cuarenta a la de Canarias o la Península, pero en su libro se ha limitado a narrar "cosas normales", como son el colegio, los chicos del servicio doméstico o los hausas o nigerianos que vendían artesanía.

La escritora recuerda anécdotas muy curiosas y divertidas como cuando, con sólo seis años, "en mi casa entró un gorila que pasó entre mi hermana y yo y que iba tan furioso que ni nos vio", o "una cobra que entró en el jardín cuando tenía trece años y mi padre la mató".

Curiosidades

Gracián Galbeño añade que "hay cosas tan curiosas en el libro que muchos que lo leen y si han estado allí, lloran de emoción y nostalgia por ese paraíso perdido, y los que no han estado me dicen que lo narro de tal manera que parece que han estado allí". Fernando Poo era una tierra maravillosa en la que vivieron muchos canarios que ahora "somos hermanos de tribu". La escritora reconoce que "tengo una memoria privilegiada" y que en seis semanas tenía el material hecho".

El libro está trufado del paisaje y del sonido de la Isla con una gran relevancia de los negros de la raza bubi, los de la Isla y "que era gente muy noble que nunca sale ninguno dando problemas", señala, y la mayor parte del libro se desarrolla en la antigua capital de Santa Isabel.