"Queremos ofrecernos al Gobierno para hablar de nuevos modelos de negocio y que la inversión en cultura contribuya a la recuperación económica de Canarias". Este es el mensaje que lanzó ayer el gabinete de crisis de boca de uno de sus portavoces, el músico Enrique Mateu, al ser cuestionado acerca de la estrategia que mantendrá el sector en los próximos días, de cara a lograr que el Gobierno canario reconsidere la reducción en un 65 % del presupuesto de la Viceconsejería y Cultura y Deportes del Gobierno regional en 2012. "Esto es solo el principio", dijo Mateu, tras reiterar el "total rechazo" a esta medida, que deja a Cultura con 13 millones, de los que solo podrá utilizar 790.000 euros libres para inversión directa, frente a los 48 millones de este año que dejaban un remanente de 28 millones para la financiación de eventos y proyectos de distintas disciplinas.

Expresiones como "tiro en la nuca", "esto no es un sector de subvencionados" o "el recorte es un regalo a la ignorancia", tal como rubricó Mario Vega, portavoz y productor artístico, sonaron ayer en medio de las pérdidas y del quebranto a la actividad de unas 3.000 empresas culturales y sus aproximados 16.000 trabajadores. Para el miércoles se ha convocado una asamblea para trasladar sus demandas a los partidos y que estos corrijan esta crisis vía enmiendas.