La decisión de la escritora Lucía Etxebarría de no escribir más novelas en un periodo largo de tiempo debido al perjuicio que le está produciendo la piratería en internet, ya que se descargan más libros de los que se venden, es recibida con cautela por sus compañeros de profesión en las Islas.

Alberto Vázquez-Figueroa no entra a valorar las declaraciones de la escritora, pero opina que "si escribes solamente por lo que vas a cobrar, y si no lo vas a cobrar no lo escribes, es que realmente no eres escritor". En su opinión, "escribir o no escribir no es una cuestión de dinero. Durante 25 años estuve escribiendo y no gané nada. Empecé a escribir a los 18 años y llegué a los 40 y pico sin ganar nada. Si lo que te mueve es que no te paguen es que tienes poco de escritor". El escritor tinerfeño añade que "yo escribo porque me gusta escribir, me paguen o no me paguen. Y muchos de mis libros, desde hace muchos años, los regalo en internet".

A Fernando Delgado le "merece respeto cualquier decisión que alguien tome cuando siente que sus derechos son ultrajados", pero, al igual que lo que dice Vázquez-Figueroa, supone que "va a dejar de publicar, porque dejar de escribir no lo va a dejar ningún escritor que realmente lo sea".

Carlos Álvarez se muestra más ambiguo ya que "la red ha hecho que autores hayan vendido más y otros menos, pero algunos han sacado rendimientos económico a sus obras".

José Luis Correa aclara ante todo que "la gente debe entender que un libro es un esfuerzo para el escritor , y que puedes estar dos años para escribir una novela". El escritor grancanario señala que "mientras la gente está en la playa o de juerga, yo estoy escribiendo, y le estoy sacando tiempo de otros lados para escribir mis obras".

Finalmente, Antonio Lozano comprende el enfado de Lucía Etxebarría. "Hay que tener en cuenta que en la cadena de la industria editorial el escritor está en la cola en lo que a remuneración se refiere", señala. "Si además el fruto de su trabajo -y no olvidemos que una novela no se escribe en tres días- es pirateado sin que nadie haga nada para evitarlo es fácilmente entendible la queja de los escritores", dice, por lo que se pone en el lugar de la autora valenciana.