El aforo está completo y las luces de la sala seis del cine Monopol a media potencia. Bajo la pantalla, dos figuras reciben una buena dosis de cariño. La estrella y el director plantean un repaso a 25 años de historia del rock canario y "la banda sonora de nuestras vidas". Al terminar, concluye: "Apaguen los móviles y disfruten la película. A mí, la verdad es que no me gusta". Así es él, Ginés Cedrés. Genio y figura.

Hasta el amanecer, aquellas tres palabras que completaban el estribillo del himno generacional de Los Coquillos, se ha convertido ahora en el título de una película documental que repasa la vida y obra de su cantante, Ginés Cedrés. Ayer, se estrenó en el marco del Monopol Music Festival y el día 17 comienza su exhibición en sala. El protagonista admitió estar ante un momento personal emocionante. "No todos los días se sienta uno en una butaca del cine para ver tu vida pasar", explicó, antes de alabar el trabajo del director Nico Alva, que ofrece una mirada distinta sobre "uno de los personajes más queridos que existen en las Islas", según expresó el cineasta. Este explicó que acumula 16 meses de trabajo con un proyecto en el que se muestra, como en aquel disco de caras B de 1999, Todos los rostros, de Ginés.

Pero el título, pese a coincidir con el 25o aniversario de la banda, aborda especialmente la doble vida de Cedrés: cantante alocado sobre el escenario y bibliotecario intelectual en su rutina semanal. "Nico quería contar esa historia desconocida, lo que pasa es que al coincidir con el aniversario la cosa se fue complicando", expuso ayer Cedrés, que durante el último año ha cerrado página de su etapa con Los Salvapantallas, la banda de versiones a la que sumó tras finiquitar la historia oficial de Los Coquillos, en medio de los actos de aniversario y las grabaciones de la película.

"Hemos rescatado mucho material gráfico y sonoro que nadie ha visto", expuso Alva, un director con 20 años de experiencia y trayectoria en el audiovisual en las Islas, que recordó cómo fue con una idea a la Biblioteca Central de la ULPGC. "Me pareció curiosa esa doble vida y que Ginés se pase la semana mandando a callar y durante el fin de semana invite a gritar a esa misma gente desde el escenario".

El protagonista recordaba anoche aquella escena en la que un loco vino a verlo al Campus. "Yo suelo entregar mi corazón muy fácilmente, algo que no es del todo bueno", advirtió Cedrés, antes de revivir cómo abordó al director posteriormente con un: "oye, tu cara me suena". Pues claro. Nico fue guitarrista de El Rey Cuervo y Ginés grabó su primera maqueta. No solo eso. El batería José Mari fue pipa -responsable de instrumentos y músicos sobre el escenario- de Los Coquillos. Tras este descubrimiento, el acuerdo entre ambos quedó sellado. "Lo firmamos en una servilleta, como Messi", apostilló.

La pantalla muestra a un Ginés íntimo y desconocido, "con mis miedos, demonios y mi afición al vino", añadió. Alva aseguró que juega con ventaja: "Es un tipo complejo y con aristas. Eso no le genera un distanciamiento. Al contrario. Todos le quieren".