Brad Pitt ha rodado en su carrera todo tipo de escenas que la magia del cine hace parecer heroicas, pero seguro que no imaginaba que en Canarias se le va recordar por una niña a la que sacó de una multitud que la aplastaba contra las vallas que protegían el rodaje de la película Allied, en la que trabaja el actor

Brad Pitt ha quedado impreso para siempre en el corazón de Claudia Bogaush Hernández. "Fue él quien me ayudó", destaca la niña, que le confesó tras el incidente "I love you, Brad", porque es de las cosas que sí sabe decir en inglés.

Son las 15.00 horas, Claudia sale del colegio Fernando Guanarteme abrigada con un rebeca que le hace pasar calor, porque hay 24 grados en Las Palmas de Gran Canaria, pero no le importa: "Es la que llevaba puesta cuando me cogió Brad Pitt. No me la he quitado desde entonces", confiesa esta niña, que acaba de ver cumplido un sueño. Ya le gustaba Brad Pitt antes del incidente, pero ahora es su héroe.

Esta joven escolar de 11 años aspira desde hace años a convertirse en actriz. De hecho, ya hace unos años que pidió a sus padres que la apuntaran a una escuela de interpretación y por eso no dudó el pasado domingo en acudir con varias horas de antelación a una de las calles donde Robert Zemeckis iba a rodar Allied para ver en primera fila cómo es por dentro una superproducción de Hollywood.

Lo que no podía imaginar es que, por unos días, le iba a robar el protagonismo a la actriz francesa Marion Cotillard, que interpreta a una combatiente de la residencia con la que el oficial de inteligencia Max Vatan (Brad Pitt) contacta en una arriesgada misión en plena Segunda Guerra Mundial, rodeados de espías nazis.

"Cuando Brad Pitt se acercó a las vallas, como es un actor famoso, la gente hizo avalancha. Y mi madre y yo estábamos delante. Fue muy agobiante. Me estaba quedando sin respiración y mi madre me levantó por los pies para que cogiera aire. El se dio cuenta y me ayudó", cuenta, risueña.

El episodio acabó bien, sin más consecuencias para Claudia ni su madre que un susto... Y el privilegio de haber sido invitadas a seguir el rodaje de cerca, con el equipo de filmación, por el mismísimo Brad Pitt, que luego se acertó a interesarse por cómo se encontraban y se prestó a tomarse unas fotos con ella.

La madre, María Dolores Hernández, coincide en su versión con la niña. "La gente empezó a agolparse contra la valla y yo oía a la niña decir: ¡mamá, me agobio! ¡sácame! En ese momento pasaba Brad Pitt, vio a la niña asustada, corrió hacia nosotras y la levantó en el aire. La atendieron y la llevaron a la UVI móvil", refiere. Añade que para ella fueron unos momentos de agustia.

Hernández dice que fue ella misma quien pidió ayuda a la estrella estadounidense, porque "era el único que se estaba dando cuenta" de lo que estaba pasando tras la valla, en las primeras filas.

"Pensé que la aplastaban. A la niña le estaba dando un ataque de ansiedad", dice esta vecina de Las Palmas de Gran Canaria, que está "superagradecida" al protagonista de Allied.

"Se abrazó a mi hija, fue superlindo. Sé que es un señor mediático, un gran actor, pero para mí es todo un caballero", confiesa María, a la que le han llegado noticias de que el artista ha preguntado a través de las redes sociales cómo se encuentra la niña.

Por si hay alguna duda, la propia Claudia se lo resume: "¡Súper!", apunta, antes de añadir orgullosa: "Además, yo quiero ser actriz, así que voy a seguir sus pasos".

Por el momento, Robert Zemeckis, Brad Pitt, Marion Cotillard y las más de 300 personas que componen el equipo de "Allied" en Canarias han abandonado la isla para empezar a rodar en Fuerteventura, donde ahora Max Vatan y Marianne Beausejour seguirán viviendo su aventura en el desierto tras las líneas enemigas.