La última exposición sobre Pablo Picasso que ha llegado a China lo ha hecho con polémica, bajo las críticas de un reconocido artista pequinés que pone en duda la autenticidad de las piezas.

Picasso en China se estrenó hace pocos meses y el éxito que ha conseguido se iguala a la controversia que ha despertado, aunque los organizadores de la exhibición se mantienen firmes: "Actualmente, cualquiera puede recibir críticas infundadas", defendió ayer Zhang Xiaomei, la presidenta del grupo encargado de la muestra, Riverside.

Picasso en China llegó el 28 de mayo al museo Riverside de Pekín y hasta ahora ha conseguido entre 70.000 y 80.000 visitas, entre ellas la del artista y crítico de arte Liang Kegang, quien se sintió estafado al visitarla pues consideró que algunas de las obras que allí se presentan no eran del reconocido autor malagueño.