El XI Congreso Internacional Galdosiano afronta este viernes, 23 de junio, su última sesión tras abordar desde múltiples ángulos la poliédrica figura del escritor grancanario de la mano de 90 especialistas llegados de 11 países distintos.

La Casa-Museo Pérez Galdós, sede de esta jornada de cierre, junto con la Casa de Colón, ha acogido a las09.30 horas la reunión de la Asociación Internacional de Galdosistas. Una hora más tarde se celebró una sesión especial bajo la dirección del comité científico para hacer un balance final y elaborar un documento de perspectivas de un cónclave que se ha desarrollado bajo el lema de La hora de Galdós. A las 12.30, los congresistas descubrieron la exposición Galdós y la música, también en el citado centro dependiente de la Consejería de Cultura del Cabildo, cita en la que ejercerá de cicerone el comisario de la muestra, Pedro Schlueter.

Ya por la tarde, a partir de las 17.00 horas, se celebra la sesión oficial de clausura del XI Congreso Internacional Galdosiano con la lectura de la memoria y la entrega de las distinciones Galdosianos de Honor. En este acto participará el director general de Cultura, Patrimonio Histórico y Museos, Oswaldo Guerra.A su término, Hazel Gold, profesora de la Emory University de Estados Unidos, protagonizará la conferencia plenaria, titulada La arquitectura de la memoria galdosiana.

En su intervención, Gold esboza una primera aproximación teórica a los usos galdosianos de la memoria en su corpus ficcional y ensayístico. Según su teoría, se puede afirmar que el escritor canario aborda la cuestión de la memoria desde tres dimensiones claramente articuladas y entrelazadas: la autobiográfica (las reminiscencias de Memorias de un desmemoriado); la narrativa (la disposición temporal de las tramas novelísticas y cuentísticas, los recuerdos de los narradores y personajes); y, finalmente, la histórica.

Asimismo, el espíritu de Galdós tomó cuerpo y proyectó su voz inmortal ayer en el seno del XI Congreso Internacional Galdosiano gracias a la versión teatral de Claudia Robaina de la novela Misericordia (1897), de la que se interpretaron varias escenas en la noche del pasado miércoles por parte de alumnos y alumnas del Taller Persona-Personaje, en marcha desde hace cinco años con el apoyo de la Fundación Mapfre Guanarteme. El director general de Cultura, Patrimonio Histórico y Museos del Cabildo, Oswaldo Guerra, señaló en la presentación previa a la representación que supone "un privilegio" tener la oportunidad de disfrutar de un espectáculo de estas características en la isla y agradeció a los artistas implicados su generosidad y su participación desinteresada en la programación de actividades complementarias del Congreso.