Aliento de Partenón dorado. Del Insular al Gran Canaria. Las peñas de la UD Las Palmas invocan al espíritu del recinto de Ciudad Jardín -donde se conquistó el último ascenso a Primera (21 de mayo de 2000)- para guiar al equipo de Juan Manuel Rodríguez al cielo. Antonio Martín Tavío, presidente de la Peña Unión Amarilla Guanarteme, cruza la puerta cero de Tribuna y pisa el teatro de los sueños amarillos.

"Aquí respira la historia pero da pena verlo así. Viví la edad de oro de este equipo y ahora me llevaría el aliento del Insular a Siete Palmas. Sería el mejor fichaje para batir al Almería", confiesa Antonio Martín, de 64 años, y alma del grupo de seguidores que se fundó en 1996. El abonado fotografía el ambiente previo a las grandes citas ante Madrid, Barcelona y Atlético. "Esto era un infierno para los rivales; todavía recuerdo cuando tumbamos al Madrid de Butragueño por 4-3. Fue un partidazo de furia".

Francisco Pérez Falcón Pancho trabajó en el marcador del Insular. Cambiaba el 'cartelón' con el tanto de cada equipo. "De Naciente a Tribuna, esto era la otra bombonera. Me viene a la memoria cuando el Barça se puso de rodillas y luego fue la luz. Son tantas anécdotas que deberían pasar a la gran pantalla".

Por su parte, Manuel Ramírez, dirige la Peña Juanpe Cruce de Arinaga. De generación a generación. Manuel viaja en la máquina del tiempo e imparte cátedra a su hijo José Ramírez. "Me sentaba en la grada Naciente y venía con tu abuelo desde Cruce de Arinaga. Tengo en mente una alineación: Oregui, Martín Marrero, Aparicio, Castellano, Tonono, Guedes, León, Gilberto II, José Juan, Germán y Gilberto I. Esa UD hubiese destripado a cualquiera; incluso al Madrid de Mourinho", exclama desde el centro del campo que ahora es una selva de matojos.

Ramírez apuesta por un ambiente de gala mañana en el Gran Canaria ante el Almería. "Esta afición nunca falla; habrá una buena entrada pero para clonar el ambiente del Insular habría que sentarse en las gradas más próximas al césped. Así, se ofrecería un calor similar al del Insular. Siete Palmas podría ser una caldera", argumenta.

Terremoto de gloria

Déborah Suárez porta el estandarte de la Peña David García. El grupo más fiel del capitán rinde tributo al efecto Insular. "¿Qué me llevaría del Insular al Gran Canaria? Todo. La mística, las buenas sensaciones... El último ascenso a Primera fue un terremoto hermoso y que forma parte de nuestras vidas. Los goles de Rubén [ahora en el Betis] a Casillas. Sin olvidar la grave lesión de Miguel Ángel Valerón ante el Barça de Ronaldo en Copa [tras una entrada de Ferrer]".

Para Suárez, la circunstancia de que la UD haya descendido a 2ª B en el feudo de Ciudad Jardín no disminuye su leyenda. "La cuestión no es el recinto sino el espíritu de la afición y del equipo. La UD está respondiendo y cuando oyen a la afición del Gran Canaria sacan coraje".

Santiago González Toledo Santiaguito tiene 78 años y es el seguidor perfecto. Su vida es la UD. "Aquí cayó el Millonarios de Bogotá con Alfredo Di Stéfano en sus filas. Otra jornada para la historia", apunta. Germán Dévora y Pierre Sinibaldi -extécnico amarillo que falleció en enero- respiran en su corazón. Unidos por el recuerdo, Santiaguito resalta el amor por un escudo. "Lo llevamos tatuado", finaliza. Mañana, su corazón volverá a latir de amarillo y apela al espíritu del Partenón de los sueños de Ciudad Jardín.