"Soy consciente de que es una locura". Reflexiona Marcos González Espino, de tan sólo 20 años, natural de Mala, en el municipio lanzaroteño de Haría y que hace apenas tres meses obtuvo el carné de conducir. A pesar de su corta experiencia al volante, este espigado joven, de 55 kilos de peso, se enfrenta a un reto: debutar en el mundo de los rallys en el emblemático Rally Islas Canarias-El Corte Inglés.

Sobredosis de fe ante una bendita locura. "Todo partió de mí; ya he participado en varias pruebas como copiloto, y después de sacarme el carné decidí que quería correr en rallys y que quería hacer un El Corte Inglés", apunta, mientras espera frente a un taller de Santa María de Guía a que el mecánico le abra la puerta para sacarse la foto junto a la montura que le bautizará en este tipo de competición: un Renault Megane, con caja de cambios secuencial, unos 170 caballos y 2.000 centímetros cúbicos.

Sus padres no le pusieron ninguna pega. Al revés, le apoyaron. "Tanto mis padres como mi hermana Libertad y mi hermano Josué me dan su apoyo máximo, aunque al igual que yo han pensado que lo que voy a hacer es una locura", declara. Y es que por delante tiene más de 200 kilómetros de tramos cronometrados.

Los colores oscuros del coche de la marca del rombo tendrán el contraste en la parte trasera del verde que bordea la L que Marcos llevará durante la celebración de los tramos para que todo el mundo sepa que todavía sigue siendo un conductor novel.

Sin embargo, ésta no es su primera incursión en el mundillo del automovilismo. "A mi padre le gusta el motor y con cuatro años ya me metió en los kart", empieza, y sigue: "Competí hasta 2007, cuando fui campeón de Canarias".

Entonces cambió de modalidad. "En 2009 empecé con los rallys como copiloto. Primero estuve con mi hermano Josué", que también ha competido con el mismo coche con el que debutará Marcos. Después se sentó a la derecha de dos campeones de España de rallys en tierra. "Estuve con Samuel Lemes en un rally de tierra en Fuerteventura y con su hermano Yeray en el Rally de Lanzarote de 2009 y el de Teror en 2012".

De todos, de Josué, Samuel y Yeray, ha aprendido técnicas que intentará poner en práctica a partir del jueves, con la celebración del shakedown (tramo de pruebas), aunque ve muy lejos poder llegar al nivel de los tres pilotos que considera unos maestros.

Para esta prueba Marcos González sólo tiene un objetivo: "acabar". "En principio ése es el objetivo, terminar el rally y hacer el número máximo de kilómetros, hacerme al coche y disfrutar de la prueba; y después si se puede hacer algo más se hace, pero siempre el objetivo es llegar a la meta".

Y para ello tiene a su derecha a otro joven pero experimentado copiloto, el grancanario Eduardo González Delgado, quién a pesar de contar con 24 años ya tiene 25 rallys a su espalda. González Delgado destaca de su piloto la tranquilidad. "Es una persona que no se altera y que yo creo que poco a poco irá mejorando con el paso del rally, aunque creo que tenemos que mirarnos a nosotros mismos, nuestros tiempos, y no compararnos con nadie", finaliza un novato que dará que hablar. Siga la L en el asfalto. De la autoescuela a los tramos del Rally El Corte Inglés.