Ramírez coloca a Juanito como gerente del Real Ávila, de Tercera

Fue el propio exportero de la entidad amarilla, abulense de nacimiento, quien convenció a ambos para adentrarse en este nuevo proyecto. El Ávila se encontraba en una situación complicada y al borde de la desaparición. Sus dueños no estaban dispuestos a continuar y buscaban vender el club. Finalmente Miguel Ángel Ramírez no compró la entidad pero sí aceptó que dos de sus empresas se convirtieran en patrocinadores principales. Así, después de analizar los informes que presentó Pindado, tanto Ramírez como Juanito se han embarcado en el nuevo proyecto y el tinerfeño será nombrado gerente del club dentro de dos semanas por parte del Consejo de Administración del Real Ávila.

Sin embargo, hace ya dos semanas se desplazó a la ciudad, en la que vivirá para llevar las riendas de la entidad, y ya está ejerciendo como tal. Tiene mucho trabajo por delante, pues la competición empieza este fin de semana y en este momento el Ávila solo cuenta con doce jugadores, además de más de una decena a prueba. De hecho, empezaron los entrenamientos la semana pasada, por lo que encararán el inicio de la competición con apenas quince días de trabajo. A los mandos en el banquillo estará Borja Jiménez, que ya dirigió al equipo la temporada pasada.

Doce años en Tercera

Y es que el Ávila, fundado en 1923, estaba al borde de la quiebra después de varios esfuerzos económicos de los actuales dueños para subir al equipo a la categoría de bronce. La entidad abulense lleva desde el 2003 estancado en Tercera División, aunque ocho de esas once temporadas ha logrado disputar la promoción de ascenso a Segunda B, categoría en la que ha competido en once cursos en su historia. El club castellano-leonés nunca ha logrado competir ni enPrimera ni en Segunda División.

Los máximos accionistas de la entidad tenían claro que salvo que apareciera un inversor que apostara por el club, el Ávila no iba a competir y estaba destinado a desaparecer. Eso provocó que el equipo no echara a andar hasta la semana pasada, por lo que empezará la competición en una situación de desventaja con respecto a sus rivales en la categoría. El equipo disputa sus partidos como local en el Municipal Adolfo Suárez, con capacidad para 6.000 espectadores, que debe su nombre al expresidente del Gobierno, natural de Ávila.

Fue Pindado, amigo personal de Ramírez y Juanito, quien convenció a ambos. El exportero había iniciado la temporada en Bulgaria como asistente de Pepe Murcia en el Levski Sofía. Sin embargo, tan solo 55 días después de su contratación decidieron rescindir el contrato debido a "intromisiones", según declaraciones de Murcia. Tras volver a España y conocer la situación del club de su ciudad presentó el proyecto a Ramírez y Juanito.

Un ascenso y desencuentros

Así, Juanito encuentra nuevo destino varios meses después de que la UD decidiera no renovar su contrato. Llegó al club amarillo, en el que también fue jugador, en el año 2005 como director deportivo, aunque también ha ejercido el cargo de entrenador y, por último, de asesor presidencial.

Su mayor éxito fue el ascenso a Segunda A en la 2005/06 desde el banquillo y, en la temporada posterior tomó las riendas como entrenador y salvó al equipos. Sin embargo, su paso por el club amarillo está marcado por sus continuos desencuentros con la grada, que le ha señalado en multitud de ocasiones. Ahora, Juanito inicia una nueva etapa en el Real Ávila.

Extremadura, etapa de final amargo

Antes de sus años en la UD Las Palmas Juanito Rodríguez estuvo al mando del CF Extremadura, en la que fue su primera etapa en los despachos de un club de fútbol después de su exitosa carrera como jugador. Fue elegido presidente en el año 2001 desbancando a Pedro Nieto. Entonces, Juanito ya era secretario técnico y poseía el 10 por ciento de las acciones de la entidad. Todo ello ocurrió apenas unos meses después de colgar las botas en el conjunto azulgrana, en el que estuvo cuatro temporadas como jugador. Sin embargo, no tuvo suerte y el club descendió a Segunda B en su primera temporada al mando. Permaneció allí hasta el año 2005, temporadas en las que el club, que disputaba sus partidos en el Francisco de la Hera, no consiguió disputar la fase de ascenso. Así, en el año 2005 presentó su dimisión ya que tenía como objetivo convertirse en entrenador. El club azulgrana tenía deudas acumuladas de sus años en Primera División, la 1996/97 y la 1998/99, y acabó desapareciendo en el año 2010. Su lugar lo ocupa el Extremadura UD, fundado en 2007, que compite en Tercera División.