A 208 días del inicio de los Juegos Olímpicos de Río, la tabla del CN Metropole conforma el laboratorio perfecto. El próximo 16 se disputa en Madrid la máxima prueba nacional para sellar las plazas de la selección en la modalidad de saltos. Y de ahí, a la Copa del Mundo en febrero. Por ese sueño, lucha talento isleño.
A la caza de un billete para los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro. Pulir talento desde la plataforma del CN Metropole. La 28ª edición de la Pepsi Diving Cup, que se celebra en el prestigioso club capitalino, a seis días del Grand Prix de Madrid (cita que define los saltadores de la selección nacional que acudirán al preolímpico de Río, última oportunidad para sellar el billete en febrero a los Juegos) es el laboratorio perfecto. Un torrente de ilusión y clase desde los tres metros con una doble representación grancanaria con opciones de acudir a la prestigiosa cita olímpica -que arranca el próximo 5 de agosto-. Héctor García Boissier, plata con 328, 45 puntos, y su hermano Nicolás (327, 25), bronce, dejaron su sello de glamour en la categoría de salto de trampolín de tres metros. Una declaración de intenciones de las dos estrellas del Metropole. Solo fueron superados por el irlandés Oliver Dingley -408, 40 puntos- que se dio un baño de oro. Pablo Socorro (CN Metropole), séptimo, completó la representación isleña con 262, 65 puntos.
Se da la circunstancia, de que el pasado viernes, el irlandés Dingley ya tumbó a los hermanos Nicolás (plata en esta ocasión) y Héctor en la modalidad de salto de un metro. El saltador Nicolás García, que participó con gripe, desmenuzaba el mapa hacia Río, un viaje desde la ilusión para entrar en la leyenda de esta exigente disciplina. "Esto es un mero rodaje, tenemos que saltar y probar. La próxima semana tenemos el Grand Prix de Madrid y ahí no podemos fallar. Es donde donde nos jugamos los españoles la plaza para ir a la Copa del Mundo -el preolímpico-. Lo de hoy (ayer para el lector) es una toma de contacto. Un entrenamiento para la semana que viene; quiero estar en Río en el preolímpico, será en la misma piscina de los Juegos de Brasil y para mí representa un gran desafío".
La lesión de Javier Illana
El doble medallista en esta edición de la Pepsi Diving Cup está en el momento crucial de la temporada. Y de los últimos cuatro años de lucha y sufrimiento. Pero no le puede la presión. Atesora un poder sobrenatural. De Madrid a Río. Y luego, los Juegos. Una hoja de ruta de acero.
"En febrero llega una competición clave, y parece que lo tengo de cara -en relación al preolímpico-. La estrella es Javier Illana pero está lesionado. No va a competir la próxima semana en Madrid y eso obviamente no le clasifica para Río. El otro es Alberto Arévalo de Madrid. Y mi hermano no podría asistir al estar estudiando en Estados Unidos. Las dos plazas vacantes -de la selección- serían para mí y Alberto". Pero acude rápido al corte, la presencia del madrileño pasa por superar únicamente el registro de su hermano. Todo está estudiado.
"Al no poder ir al preolímpico, ya hizo una competición previa y mi hermano le ganó a Alberto por poco. Para que Héctor pueda ir a Río, no puede superarle". Desvela que está "resfriado" pero que no ha parado de entrenar. "Los cambios de temperatura de este fin de semana me perjudican pero ya he terminado de competir. En uno dos días me recupero y estaré en Madrid".
¿En qué piensa cuando vuela? ¿Le afecta la mirada diabólica de los jueces? El secreto, vivir en una cámara acorazada. "En las competiciones te aíslas. Vivir en una burbuja y que nada te afecte. Tampoco pensar en la idea del salto, lo has entrenado muchas veces. Si te comes el coco en la tabla, el salto irá a peor".
Elogia el nivel de ingleses y chinos, pero 'Nico' busca "la mezcla de los mejores". Estudiante universitario -segundo de Ingeniería Naval en la ULPGC-, va de Tafira a la piscina. Todo por Río. "Entreno por las mañanas todos los días. Voy a comer y directo a la Universidad". Alejado de los centros de alto rendimiento, forja su espíritu indomable en el paraíso. "Soy más de casita". Del Roque Nublo a la gloria olímpica carioca.
