El Deportivo le ha infligido al Eibar la primera derrota en un estreno en Primera (2-1), en un partido que desequilibró Lucas Pérez con un polémico penalti en los últimos minutos y en el que los tres goles llegaron en la segunda parte y a balón parado.

Los vascos se adelantaron con un saque de esquina en el arranque del segundo periodo, pero el Deportivo reaccionó con una falta que remató Pedro Mosquera y, sin brillo, desequilibró el choque desde los once metros.

Gaizka Garitano se reencontró con el equipo al que llevó de Segunda B a Primera y planteó el partido con cuatro caras nuevas (Albentosa, Bruno Gama, el brasileño Guilherme y Carles Gil) en la alineación, en la que mantuvo al argentino Germán Lux bajo palos a pesar de la llegada de dos guardametas en el mercado estival.

El Deportivo, con Lucas Pérez en la punta del ataque, demostró en el arranque del partido que tenía hambre de fútbol oficial. El equipo de José Luis Mendilibar creció con el avance del partido y dispuso de cuatro saques de esquina antes del minuto 20.

En la reanudación, el conjunto coruñés también salió más fuerte pero en una acción a balón parado surgió el primer gol, obra del Eibar: ejecutó Bebé y cabeceó picado Ramis para colar el esférico entre Lux y el palo derecho.

El Deportivo empató de estrategia, una falta que colgó Lucas Pérez y remató en el segundo palo Pedro Mosquera. El Eibar volvió a inquietar y el gol parecía más cerca de los vascos, pero un penalti discutido de Juncà a Lucas lo transformó el coruñés para dar los primeros tres puntos del curso al Deportivo.