En el barrio capitalino de San José está ubicada la señera sociedad del bote Poeta Tomás Morales, en la que cada rincón guarda los éxitos que ha venido acumulando la embarcación joselita en los últimos años, así como los reconocimientos por parte de las instituciones con los premios que le concedía el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria con la Medalla de Oro de la Ciudad y el de Mejor Deportista Autóctono de la 58ª edición de los Premios Jesús Telo-Cabildo de Gran Canaria. Con Rafael Rodríguez Suárez (Las Palmas de Gran Canaria, 1963), presidente de la entidad joselita, hablamos de todo ello.
¿Cómo nace la exposición en el Castillo de Mata?
La idea de hacer la exposición la teníamos pensada cuando se cumplía el primer aniversario de dar la vuelta a la Isla, a lo que se unió el ser pregonero este año de la fiesta del barrio de San José y el recibir la Medalla de Oro de la Ciudad, con lo cual ya eran muchos motivos para devolverle a la ciudad algo de lo que nos habían dado y agradecérselo con la exposición de un deporte que nos gusta.
¿Que ha querido buscar la Sociedad, el bote Poeta Tomás Morales, con la exposición?
Bueno, la Sociedad y su Junta Directiva han querido, primero, homenajear a todas las tripulaciones que con el paso del tiempo alguna vez formaron parte del Poeta Tomás Morales y, segundo, a la tripulación que en los dos últimos años lo ha ganado todo. Y, por supuesto, hacerle ver a la sociedad grancanaria lo que es el deporte de los botes y lo que implica estar en un club de Vela latina canaria a través de esta exposición.
Es un reconocimiento a todos lo que han pasado por el bote...
Sí, claro, a todos los que han estado cerca del club y del bote, no sólo tripulantes, sino también patrones, directivos y gente de tierra cuyos nombres no aparecen en ningún lado y que los hemos visto llorando en el muelle cuando el bote ganaba.
¿Es ésta una buena oportunidad para que los colegios se acerquen a verla?
Por supuesto, y le puedo decir que han pasado a ver la exposición varios colegios. Y está claro que esto es también una forma de divulgar la Vela latina canaria. Pero también es verdad que llevo ocho años en el bote y en el muelle y siempre me ha dado la impresión de que las personas creen que las instalaciones de la Vela latina son una zona acotada y a la que no se puede acceder y no sé la razón exacta, pero ya que no entran a la base náutica Fernando Roque, pensamos que lo mejor era sacar la Vela latina y que la gente la conocieran con esta exposición y de paso a ver si se consiguen patrocinadores para que esto no se pierda. Hay patrocinadores que no saben que este deporte sólo se practica en esta ciudad, y es una pena.
¿Cuántas piezas adornan la exposición?
La exposición está compuesta por tres maquetas del bote, unas veinticinco fotografías de épocas pasadas y actual. La mesa central luce con la Medalla de Oro de la Ciudad, el pregón de la Vuelta a la Isla, así como varios trofeos que el bote ha conseguido en los últimos años. En las paredes también sobresalen los paneles de la historia de la sociedad y trofeos ganados en diferentes campeonatos.
Y de todos ellas, ¿cuál destacaría más?
Yo considero que todas son valiosas, pero yo destacaría la Medalla de Oro de la Ciudad. Ya que este premio no lo consigue cualquiera y es mucho el prestigio que le da al bote un premio de estas características. Es que ser medalla de oro de tu ciudad con el deporte que te gusta, es algo muy grande. Pero también tengo claro que todos los premios tienen un valor sentimental y todos son importantes para nosotros.
¿Cuál de ellas ha llamado más la atención a los visitantes?
Sobre todo las fotos con más antigüedad han sido las que más se han parado para reconocer antiguos patrones y tripulantes. Como fueron los casos de Tino de la Nuez, Santi Ceballos e inclusive al histórico patrón Gabriel Bruno, en el bote de la década de los años treinta, foto que hemos retocado. Y por supuesto el gran trabajo de las maquetas del bote.
¿Considera que esta exposición ha sido también una oportunidad para acercar la Vela latina a la sociedad grancanaria?
Yo sabía que a la gente de la Vela latina le iba a gustar la exposición, pero mi intención no era tanto para la gente de la Vela latina, sino, para la gente que no conoce este deporte, que no saben que solo se practica aquí, que tiene ciento doce años de historia y que, al día de hoy, existen personas que te pregunten qué es la Vela latina canaria.
¿Con esta exposición le ha llegado una racha de aire fresco al deporte vernáculo?
Me imagino, que esto se verá con el tiempo. Y lo que estamos haciendo se parece mucho a cuando por primera vez un bote de Vela latina daba la vuelta a la Isla. Y se empezará a entrar en valor con el paso del tiempo y la gente se acuerde de lo que hicimos con aquella travesía en la que sólo contábamos con el apoyo de dos barcos y con la aventura de dar la vuelta a la Isla. Con esto quiero decir que las cosas hay que intentarlas. Luego te podrán salir mal o bien.
Decía el concejal de deportes, Aridany Romero, que se está trabajando para que la Vela latina tenga su propio museo. ¿Cómo lo ve?
¡Ojalá se lleve a cabo la idea que propone el concejal!. Es un proyecto, que tendría que haber estado. Y viendo a las personas que han visitado la exposición, tengo claro que necesitamos un museo.
Medalla de Oro de la Ciudad, Mejor Deportista Autóctono, Vuelta a la Isla, campeón Provincial, campeón del Desafío... ¿Con qué se queda?
Me quedo con todas las personas que llevan estos años luchando conmigo para que el bote llegara a donde ha llegado, aunque es cierto que no pensábamos en conseguir tanto, y se ha conseguido. Pero lo más bonito es que no nos cansamos, ya que existe ilusión y ganas y mientras esto no se pierda, seguiremos ahí.
¿Y la relación entre instituciones y Vela latina?
Bueno tengo que destacar que desde la etapa de Mimi González y de Carlos Ester, pero sobre todo Mimi, como concejala de Ciudad del Mar, la aportación y ayuda fue importante para nuestro deporte. Ella siempre estuvo ahí para echarnos una mano. Y ahora Aridany Romero sigue estando cerca de la Vela latina y aumentando la ayuda a los clubes.
¿Cómo ve el futuro de la Vela latina canaria en los próximos años?
No lo veo tan negro como algunos lo ven... Pero sí se tienen que cambiar algunas cosas. Lo cierto es que en los últimos cinco años hemos pasado de catorce botes a nueve embarcaciones. Creo que se puede recuperar la flota de hace unos años. Pero también se tienen que hacer bien las cosas para ello. Si un club como el nuestro y haciendo las cosas medianamente bien y poniéndole ganas hemos relanzado un bote que estaba hundido, la Federación puede hacer lo mismo y no es tan difícil.
¿Ve usted al BIC (Bien Interés Cultural) como la panacea al futuro de la Vela latina canaria?
Como la panacea no, pero si como una ayuda importante. Antes era un deporte que se podía ayudar y ahora es un deporte, que tienen que obligatoriamente ayudarlo, porque no lo puedes dejar perder. Esto es una diferencia bastante importante. Y está claro, que hay que saber también venderlo a las empresas, que invertir en un deporte con Bien de Interés Cultura, te desgravan y de paso se implican en algo que está ayudando y que es nuestro.
