Siempre quieren más y te aprietan hasta el final con tal de subir un punto su rentabilidad". Ésta es la afirmación de un asesor financiero de Banca Banif en Canarias, la banca privada del Grupo Santander. Los tíos gilitos de la economía canaria son empresarios de entre 50 y 60 años, que han aprovechado la bonanza económica de hace unos años para amasar sus fortunas. "La edad de los ricos ha cambiado en los últimos tiempos y comienzan a aflorar inversores más jóvenes", explica el asesor de Banif.

Empresarios de la construcción, que sacaron la mejor rentabilidad en la época de las vacas gordas, directivos turísticos, abogados, médicos y arquitectos, componen la constelación de los ricos en Canarias. "Se trata de personas con un patrimonio elevado y con una gama de necesidades más compleja que cualquier cliente tradicional y que nosotros cubrimos".

El asesor financiero ofrece gestión, financiación, planificación, asesoramiento en inversiones y operativa bancaria. Muchos de ellos, continúan desde la entidad financiera, adquirieron inmuebles a precios de coste y sobre plano, que vendieron a tiempo en el punto más álgido del mercado inmobiliario. Un olfato inversor que los ha llevado a quintuplicar, en algunos casos, su inversión inicial y les ha llevado a anidar en el paraíso de la riqueza.

Asimismo, los asesores consultados por este periódico destacan también que "el turismo ha permitido, durante muchos años y en gran medida, activar la construcción, y eso es lo que ha movilizado la economía". Estos expertos sostienen: "Trabajamos para sacudir esa dependencia y crear otras fuentes para repartir el riesgo porque a nuestros inversores no les gusta perder ni una oportunidad de ganar más dinero y en el menor tiempo posible".