China devaluó ayer casi un 2% el yuan con respecto al dólar, en la mayor revisión a la baja del valor de su moneda en dos décadas, y reformó el sistema cambiario, para estimular su economía tras la caída del comercio exterior.

El Banco Popular de China (central) anunció una renovación en el mecanismo de fijación del tipo de cambio del yuan para tratar de acercarlo a su valor real del mercado, que tuvo como efecto inmediato una caída de la divisa china en comparación con el dólar.

El banco central chino ejerce un férreo control sobre las oscilaciones en el tipo de cambio del yuan, ya que cada día establece un precio medio (llamado paridad central) del tipo de cambio del yuan con el dólar y permite que fluctúe (al alza o a la baja) hasta un máximo de un 2%.

Con la acumulación de estas ligeras fluctuaciones diarias, el yuan se ha revalorizado fuertemente en la última década, pero el banco central considera que últimamente la cotización que fija para el yuan se había "desviado" respecto a su valor de mercado. "Recientemente, la paridad central del yuan se ha desviado del tipo de cambio del mercado en una gran extensión y con una larga duración, lo que, hasta cierto punto, ha debilitado su estatus de referencia", dijo el banco central en un comunicado.

El regulador consideró que "mejora" el sistema cambiario al obligar, a la hora de fijar el precio medio de cada día, a tener en cuenta la cotización de mercado del yuan de la jornada anterior.