El Servicio Canario de Empleo (SCE) solo medió en el 1,5% de los contratos firmados en el Archipiélago en 2014. Este exiguo resultado a la hora de colocar a parados en el mercado laboral a través de la mediación pública sitúa a Canarias en el vagón de cola nacional, ya que solo supera a Baleares (1,3%) y Cataluña (1,4%) en este ranking. Así, de los 637.800 contratos suscritos en las Islas hace dos ejercicios, solo 9.900 cuentan con participación pública, según los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE) mediante las variables de submuestra de la Encuesta de Población Activa (EPA).
Para tratar de mejorar la inserción en las Islas, una de las políticas activas de empleo del Ejecutivo regional está dirigida a entablar relaciones con las empresas de trabajo temporal (ETT) y las agencias de colocación, si bien el volumen de personas que fueron contratadas por esta vía en ese mismo período fue menor: 5.100 (0,8%).
Alejandro Martín, director del SCE, defiende la actividad que desarrolla el órgano que dirige y subraya que las cifras subestiman la labor del mismo porque, por un lado, solo tienen en cuenta el primer contrato que firma el desempleado gracias a su intermediación y, por otro, porque los empresarios olvidan poner en el contrato la referencia que sumaría a la ofician pública de empleo una afiliación más alta. "En el sector turístico muchos contratos son temporales. Los que se logran gracias a nuestra labor se contabilizan solo una ocasión, ya que la segunda vez son llamados directamente por las empresas porque ya los conocen", explica Martín, "y otros son contratados posteriormente a partir de los currículos que descartaron en un primer momento".
Comunidades turísticas
Por eso, insiste, los porcentajes más bajos se encuentran en las comunidades autónomas más turísticas a la vez que subraya que la diferencia con la media española es tan solo de medio punto. De hecho, si se trasladan estos valores al conjunto nacional, se aprecia que de los 14,2 millones de contratos que se suscribieron en 2014, las oficinas públicas de empleo intermediaron en la colocación de 281.000 parados, en decir, un 2%.
No obstante, Martín resta importancia al dato y asegura que lo vital es que aumente el número de contrataciones sin importar "a quien se le apunte el tanto". Asegura, además, que desde entonces el SCE ha mejorado en esta línea aunque aún no se hayan publicado las cifras. "Nuestro objetivo es convertirnos en un verdadero puente entre el parado y la empresa y trabajamos en ese camino", remarca Martín.
A tenor de la inestabilidad económica y los estragos que estaba causando en el mercado laboral esa coyuntura desfavorable, el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero impulsó en 2010 un real decreto para regular a las agencias de colocación y potenciar la colaboración público-privada para aumentar la inserción laboral.
A partir de ahí, el Ministerio de Empleo estableció un acuerdo marco con estos agentes. En Canarias se suscribió ese convenio posteriormente y se inició, de este modo, un procedimiento de licitación con las agencias que resultaron adjudicatarias en el previo procedimiento nacional. Así, para el período que transcurre entre el 30 de diciembre de 2014 y el 29 de junio de 2015, cuatro fueron las adjudicatarias en las Islas: la Unión Temporal de Empresas (UTE) constituida por Formación Vértice Emprende Instituto Abierto de Formación Interactiva y Formación Vértice Emprende, Europea de Formación y Consultoría, Fundación Sócrates y la UTE formada por Emplea selección ETT SL y Escuela de Negocios MBA.
Finalmente, el plazo se prorrogó hasta el 29 de septiembre del ejercicio pasado y el importe total de la adjudicación fue de 605.646,62 euros. Las personas asignadas a cada agencia de colocación recibieron una valoración de su perfil profesional, talleres formativos y el envío y seguimiento de sus candidaturas en las diferentes ofertas de trabajo. Además, por cada inserción conseguida por estas cuatro agencias, a las que se derivó 2.178 desempleados, la Administración les abonó una cuantía adicional que varía en función del perfil del parado, entre otras cuestiones. "Prestamos atención a las ETT y a las agencias de colocación para trabajar de forma conjunta en la inserción", indica el director del SCE, pero cree, en cambio, que aún no han demostrado todo su potencial en las Islas.
Formación
El 70% del presupuesto del SCE se destina a la formación. "Nuestros esfuerzos no se centran únicamente en la intermediación para lograr contrataciones, sino que en buena medida éstos se dirigen a capacitar para el empleo", explica Alejandro Martín. Entre los diferentes programas que impulsa el SCE, Martín destaca dos: los integrados, en los que se combina lorientación laboral, formación certificada y prácticas y los de alternancia, donde se impulsa a la vez la formación y el trabajo.
En cuanto a las mejoras que ha introducido el SCE para lograr colocar a más parados en el mercado laboral, se encuentran la posibilidad de presentar on line ofertas empresariales en la página web del órgano, la gestión personalizada con el empresario y el fomento de la autocandidatura. De hecho, Martín señala que con estas herramientas en 2015 se presentó un mayo número de ofertas empresariales que en 2014, si bien aún no puede detallar una cifra concreta.
En este sentido, Martín indica que los empresarios aún desconocen todas las herramientas que tienen a su disposición, por lo que tratarán de aproximarse más a ellos, como ya ha ocurrido con los desempleados a través de una aplicación móvil que les permite postularse como candidatos o renovar el paro. "Este año la intención es que se desarrolle también para las empresas", anuncia el director del SCE, "y reforzar así las relaciones que prestamos al tejido empresarial".
Y es que para Martín esta es una buena iniciativa, más aún por la experiencia cosechada con los parados, ya que cerca de 40.000 usuarios ya habían utilizado esta aplicación a finales de 2014.
