El presidente de la Asociación Industrial de Canarias (Asinca), Andrés Calvo, se queja de que Canarias no cuente con una estrategia unificada de lucha contra el cambio climático sino con políticas y medidas variadas, aunque con ese objetivo común. Los industriales reiteran la "demanda histórica" de cambiar el mix de la producción energética donde el gas es un elemento esencial como fuente menos contaminante que el petróleo en el camino hacia la plena implantación de las energías renovables. Calvo también fija como prioridades de los industriales el tratamiento de los residuos como una potencial vía de negocio para crear nuevos nichos de mercado y el respaldo a los productos elaborados en Canarias como forma de reducir la huella de carbono en la economía canaria.

Calvo participó ayer como representante de los industriales en el Foro LA PROVINCIA organizado por JTI, Astican y PwC bajo el título Hacia una economía baja en carbono. Junto a Calvo también intervino en la mesa redonda el director de Ingeniería de JTI, Juan Pedro Monteverde.

El dirigente industrial explicó las dificultades que supone para el tejido empresarial canario la introducción de medidas de lucha contra el cambio climático, debido a que más del 85% está formado por pequeñas y medianas empresas. Calvo puntualizó que las medidas que aplican las grandes empresas suponen con posterioridad un "efecto arrastre" en las pymes al surgir nuevas "oportunidades". Sin embargo, también hay "amenazas" y, en este sentido, el presidente de Asinca criticó la "excesiva regulación" y que la Administración "imponga normas" que suponen un sobrecoste a las empresas.

Investigación universitaria

El dirigente empresarial también cuestionó los proyectos de investigación de las universidades porque no están suficientemente coordinados con las necesidades del tejido empresarial. Calvo se preguntó qué se quiere investi- gar y qué busca el investigador y demandó a los centros académicos canarios que se acerquen más a las empresas para conocer sus demandas.

Para el presidente de Asinca, las pymes deben buscar la eficiencia energética y la eficacia en la gestión sostenible de su producción, aunque también advirtió que el coste que supone la innovación en las pymes es muy alto, por lo que la adaptación de los procesos productivos a las nuevas tecnologías debe ser paulatino.

Por su parte, el representante de JTI, Juan Pedro Monteverde, recordó como hace diez años el que fuera vicepresidente de EEUU y candidato a la presidencia del país, Al Gore, defendió la lucha contra el cambio climático. "En aquel momento esta situación no era tan creíble como lo es ahora" y defendió el "acuerdo histórico" que supone París.

Monteverde advirtió que la asignatura pendiente de Canarias sigue siendo la dependencia energética y que ahora se abre la oportunidad de revertir este escenario con las energías renovales y las políticas verdes que se abren en el horizonte. Por eso defendió un plan a 30 o 50 años al margen de ideologías.

En el marco de la empresa JTI, se está haciendo un análisis medible de la huella de carbono en los diferentes procesos productivos de la empresa, desde el campo hasta que llega el producto al consumidor final. Según Monteverde, no se trata solo de la fabricación del producto y el consumo de energía sino también de la "cadena de valor" en la que también se incluye el transporte, el reciclaje de los residuos que se producen, etcétera. En este sentido defendió la formación de los empleados para potenciar la "cultura del ahorro".

Un ejemplo de JTI es el transporte de los directivos para las reuniones de empresa. Para hacerlo más sostenible se sustiyen los viajes por videoconferencias.