El gasto en prestaciones y subsidios de desempleo está aumentando en el conjunto de España a un ritmo superior al 5,4%, hasta los 18.455 millones, arruinando así las previsiones del Gobierno de Mariano Rajoy, que a principios de año esperaba un descenso en la bolsa que cada año se destina a la nómina de los parados del orden de 30.000 millones de euros. Y Canarias aparece entre las comunidades autónomas donde mayor es el incremento en ese gasto. Según los datos divulgados ayer por el Ministerio de Empleo, el Archipiélago recibe cada mes una inyección de 133,5 millones de euros en prestaciones para sus desempleados, con una cuantía media de 765,2 euros.

El volumen total de dinero que han supuesto los subsidios a escala nacional entre enero y julio asciende a 18.455 millones de euros, más de 2.500 millones solo el pasado mes de julio. Esa cantidad comprende las prestaciones contributivas a las que tienen derecho los trabajadores que cotizaron durante un número mínimo de meses y los subsidios que reciben aquellos que agotan las citadas prestaciones o que, teniendo cargas familiares, no cumplen los requisitos para cobrarlas.

En Canarias hay un total de 133.509 personas cobrando las distintas ayudas -prestaciones contributivas, subsidio de desempleo, renta activa de inserción-, de los que 83.340 son prestaciones.